Sánchez advierte al PP que la ley de vivienda deberá cumplirse también donde gobierne

El presidente del Gobierno urgió al desbloqueo de la ley de vivienda para que se apruebe antes de las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo y PSOE, Unidas Podemos, ERC y Bildu cerraron un pacto el 14 de abril para sacar la norma adelante. Este jueves, en una tramitación aceleradísima tras más de un año sin avances, el Congreso la avalará con la posibilidad de limitar el precio de los alquileres en las zonas tensionadas.

No obstante, esa declaración corresponde a las comunidades autónomas y aquellas donde gobiernan los populares ya han advertido que no lo harán. Sánchez, en la sesión de control y en respuesta a la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha criticado la oposición de los populares a la ley de vivienda y que hayan amenazado con recurrir la norma ante el Tribunal Constitucional. «¿Qué les molesta: que subamos del treinta al cuarenta por ciento el suelo de vivienda protegida [en nuevas promociones]? ¿Que no se pueda vender a fondos buitres como hacían ustedes?».

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«Ya le están diciendo a sus comunidades autónomas que se va a cumplir la ley, y les pido que hagan caso a la Comisión Europea y acaben con el atropello en el parque natural de Doñana», ha añadido el presidente Sánchez, ya cuando Gamarra no tenía posibilidad de réplica. Antes, la también portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso había acusado al jefe del Ejecutivo de acordarse de la vivienda únicamente por la proximidad de los comicios de mayo.

«La única política de vivienda que hasta ahora le ha interesado ha sido seguir residiendo en La Moncloa. Lleva cinco años y ha construido cero viviendas», le ha espetado Gamarra a Sánchez, antes de prometer, como reitera su líder, Alberto Núñez Feijóo, la derogación del sanchismo. «Es lo que hace falta frente a un gobierno en descomposición», ha zanjado.

El ambiente preelectoral se palpaba en el ambiente, con unos y otros adaptando sus discursos conscientes de la cercanía de las urnas. «Se nota que estamos en precampaña», le ha dicho Sánchez al portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián; pero después ha sido la diputada de Junts Míriam Nogueras quien le ha hecho la misma crítica al presidente: «Sí que se nota que estamos en precampaña». Además de Gamarra, que ha preguntado al secretario general del PSOE «qué miedo» tiene a cesar a ministros como Irene Montero y Fernando Grande-Marlaska, tenían turno para dirigirse al jefe del Ejecutivo los citados independentistas.

Rufián ha cuestionado a Sánchez por su gestión en Cataluña y, cuando el jefe del Ejecutivo le respondía con su habitual llamada a la convivencia y reivindicaba que la comunidad autónoma está «infinitamente mejor» ahora que en 2017, el diputado republicano le ha descolocado. «Ha puesto el piloto automático y anda más perdido que Feijóo en un debate. Lo único que el PSOE gestiona en Cataluña son los trenes, cercanías, las Rodalies», ha afirmado, generando a la vez murmullos reprobatorios en la bancada popular.

El portavoz de ERC ha enumerado que los usuarios de Rodalies, solo el año pasado, acumularon 350.000 minutos esperando a un tren, que el servicio sufrió 473 incidencias y que, en un solo día, 80.000 personas «se quedaron tiradas porque no pasó ni un solo tren». «Se nota que estamos en precampaña. Está claro. Todos nos entendemos y sabemos de qué hablamos. Es curioso que me reproche que hable de convivencia y acabe hablando de Rodalies. Bienvenido a la política real en Cataluña. Bienvenido. Encantado de hablar de estas cuestiones», ha contestado Sánchez, levantando un gran aplauso entre los diputados del PSOE.

El presidente ha contestado a Rufián que solo el seis por ciento de los retrasos en Rodalies es superior a los tres minutos y, tras amenazar el republicano con promover la reprobación de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha defendido las medidas tomadas por el Gobierno como la gratuidad de este medio de transporte para paliar los efectos de la inflación sobre el bolsillo de los ciudadanos.

También Nogueras, muy cercana al prófugo Carles Puigdemont, ha abandonado su carril habitual y ha preguntado a Sánchez qué piensa hacer para que España no lidere el 'ranking' de déficit público, según datos de Eurostat. «Tenemos que hacer muchas reformas y reconstruir lo dañado durante la respuesta neoliberal a la crisis financiera», ha respondido Sánchez, justificando los malos datos en este terreno en las políticas del PP durante su respuesta a la anterior crisis —que comenzó con el socialista José Luis Rodríguez Zapatero en el poder—.

«Escogieron la ley de vivienda como último gran anuncio de la legislatura y no les ha quedado una buena ley», ha aseverado Nogueras, quien cree que por eso Sánchez ha anunciado en las últimas fechas la promoción de 50.000, 43.000 y 20.000 viviendas públicas. «Ha tenido usted cinco años para construir viviendas», le ha reprochado la separatista, y le ha echado en cara que en vez de ello haya impulsado una ley «machacando competencias».

Sánchez ha concedido que España está por detrás en vivienda pública (3%) que la media europea (9%) y los países nórdicos (20%), pero ha defendido que por ello está promoviendo su gobierno la que ha definido como «la mayor obra de vivienda pública», pensando, sobre todo, «en los jóvenes». El 28 de mayo se acerca.