Elecciones 28M
Sánchez prioriza el 28M y no irá hoy a la cumbre de apoyo a Ucrania
El Consejo de Europa organiza una reunión que pretende ser histórica y avanzar para que Moscú rinda cuentas
Sánchez, ausente en Reikiavik
Sánchez acusa al PP de utilizar a ETA como «único argumento» en su primer mitin en el País Vasco
Page, frente a Sánchez, arremete contra los independentistas con «pistola» y añade: «Con ETA, ni a la vuelta de la esquina»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la semana pasada en un mitin de campaña electoral en Sevilla
Pedro Sánchez es el único jefe de Gobierno de un gran Estado del Viejo Continente que no acudirá a la cumbre que el Consejo de Europa celebrará esta tarde y mañana en Reikiavik (Islandia) para reforzar su apoyo a Ucrania. La cita ... se presenta como una oportunidad histórica para avanzar en la defensa de los Derechos Humanos y, no en vano, es la cuarta que este órgano internacional ajeno a la Unión Europea celebra desde su creación hace más de 70 años.
El objetivo del encuentro es que los 46 países miembros condenen la sangrienta violación de la legalidad por parte de la Federación Rusa, renueven su compromiso con los valores democráticos comunes, brinden un apoyo firme a Kiev y acuerden un medio sólido para garantizar la rendición de cuentas de Moscú por sus crímenes de guerra. Entre las posibilidades que se barajan se encuentra la realización de un registro de las atrocidades rusas en suelo ucraniano, pero es necesario que la iniciativa reciba un amplio respaldo de los Estados miembros.
Así, han confirmado su asistencia a la cita unos 40 jefes de Estado o de Gobierno, entre los que se encuentran los líderes más destacados de la Unión Europea: desde el canciller alemán, Olaf Scholz, al presidente francés, Emmanuel Macron, pasando por la líder italiana, Giorgia Meloni, el primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, o el de Países Bajos, Mark Rutte.
También acudirán esta tarde a Reikiavik la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, el jefe del Consejo Europeo, Charles Michel, y la larga lista continúa incluyendo al presidente de Portugal, António Costa, y a los jefes de Gobierno de Luxemburgo, Bélgica, Irlanda o Grecia.
Justo antes de presidir la UE
Además de asistir a la cumbre y trabajar para lograr un acuerdo frente a Moscú, la mayoría de los líderes europeos exprimirá al máximo la cita y se han fijado reuniones bilaterales con otros jefes de Gobierno para avanzar en asuntos de interés en clave nacional. Una circunstancia que -unida a que la presidencia española de la Unión Europea arrancará en apenas un mes y medio-, hace más difícil de entender que Sánchez haya dado mayor importancia a la cita electoral del 28M, de carácter local y autonómico.
Se da la circunstancia, además, de que la semana pasada el líder socialista abrió la campaña viajando a Washington. Allí mantuvo una entrevista con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que tuvo un saldo limitado para España y careció de rueda de prensa conjunta, pero sí contó con fotografía y vídeo de ambos.
Cuatro horas y media
La capital de Islandia se encuentra a cuatro horas y media en avión, y la cumbre arranca a las 19.45 hora española, por lo que Sánchez podría presidir el Consejo de Ministros y partir después hacia Reikiavik llegando a tiempo para la sesión inaugural y el debate previsto a continuación. Pero, si lo hiciera, se perdería la sesión de control en el Senado de esta tarde, en la que habrá un cara a cara con el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, una cita en la que siempre ha puesto mucho empeño el jefe del Ejecutivo.
En su equipo están convencidos de que le beneficia la confrontación parlamentaria con el líder del PP y que no podría desperdiciarla. Y menos cuando el escándalo de las listas de sus socios de Bildu, con 44 condenados por terrorismo -siete de ellos por asesinato-, está haciendo mella en sus expectativas electorales, lo que obliga al PSOE a echar el resto en campaña.
Después del rifirrafe en el Senado, Sánchez, que ayer por la tarde estuvo en Vitoria, saldrá hacia Alcalá de Henares (Madrid) para su acto diario de campaña, a la que no falta desde que arrancó el pasado sábado en Sevilla, justo a la vuelta del viaje para entrevistarse con el presidente de EE.UU. en la Casa Blanca. De hecho, incluso apurando podría debatir con Feijóo y salir a toda prisa hacia la cumbre, aunque en ese caso llegaría algo más tarde del horario previsto. Pero llegaría.
La cumbre finalizará el miércoles a las 15.00 horas, por lo que, si Sánchez asistiera, no regresaría antes de las 20.00 a Madrid y no podría estar en Baleares, en la única jornada de su caravana electoral en la que el PSOE ha programado dos mítines en sendas islas, por la mañana en Ibiza y por la tarde en Palma de Mallorca. Una intensa jornada electoral en esa comunidad, presidida por la socialista Francina Armengol, que no le va a impedir asistir el mismo miércoles, a primera hora, a la sesión de control en el Congreso, donde tampoco habrá sesiones la semana que viene.
Moncloa justifica el «no» de Sánchez a acudir a la cumbre en que la representación del Gobierno queda garantizada con la presencia del jefe de la diplomacia española, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, y en que «nos hemos excusado formalmente», aseguran fuentes de Moncloa, que enfatizan además que se trata del Consejo de Europa y no del Consejo Europeo. Si bien la mayoría de miembros de este último órgano, y sin duda los más importantes, sí acudirán.
Lo cierto es que ninguna de las citas de agenda que tiene Sánchez entre hoy y mañana, tanto como presidente del Gobierno como en su condición de secretario general del PSOE, son inexcusables. Ni el Consejo de Ministros, que en muchas ocasiones en su ausencia ha presidido la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, ni la sesión en el Senado, de la que como cualquier pleno parlamentario el presidente puede ausentarse, incluso cuando se trata de votaciones de calado, como ocurrió recientemente en la aprobación de la reforma de l a ley del 'solo sí es sí', que contó con la sonada ausencia del presidente del Gobierno y de su voto en la reforma aprobada gracias al apoyo del PP. Y en cuanto a la del Congreso, tampoco es de obligada asistencia para el presidente.
Malestar en la delegación
Al no acudir el jefe del Gobierno, la tarea de representar a España ha recaído en el ministro Albares, que ha confirmado su asistencia tanto hoy como mañana. Los otros presidentes de países miembros del Consejo de Europa que han enviado a ministros a esta cumbre son únicamente los de Suecia, Azerbaiyán, Mónaco y Turquía, lo que reduce enormemente la agenda bilateral de España en esta cita. Bulgaria envía a su vicepresidente, mientras Andorra y Serbia mandan a sus embajadores. La baja de Sánchez ha provocado cierto malestar en la delegación española del Consejo de Europa, al ser la única de un gran país de la UE que no estará representada por su jefe de Gobierno. Y, además, por carecer de argumento de peso para justificar dicha ausencia.
Francia
Macron, defensor de la soberanía política y diplomática de la UE
Por Juan Pedro Quiñonero / París
Emmanuel Macron estima que la soberanía económica, industrial, militar y diplomática de Europa debe culminar con la soberanía política que encarnan históricamente el Consejo de Europa (CdE), el Consejo de la UE y la mucho más reciente Comunidad Política Europea (CPE). Como todos sus antecesores en la presidencia de la V República, ha 'utilizado' el CdE y el Consejo europeo con dos objetivos estratégicos: defender sus intereses nacionales e intentar incrementar una cierta autonomía continental, ante el poderoso aliado trasatlántico.
El presidente francés lanzó personalmente la CPE, presentada como una «instancia de cooperación intergubernamental», que pudiera ser útil para coordinar posiciones ante el futuro de Ucrania. Las decisiones del CdE en materia de defensa de los derechos del hombre han chocado con Francia en varias ocasiones, en terrenos judiciales sensibles. Al mismo tiempo, Francia ha jugado un papel histórico central en cuestiones capitales, como el ingreso de Rusia, en 1996, y su expulsión, en marzo de 2022.
Desde septiembre de 2017, Macron milita por una Europa más soberana, con distinta fortuna. Los intereses económicos nacionales chocan, con frecuencia, en el seno de la UE.
Por el contrario, ante el incierto futuro de la crisis ucraniana, la CPE y el Consejo de Europa son instituciones donde la defensa de posiciones y valores comunes son un pilar decisivo para la identidad, cultura, instituciones y futuro de Europa.
Alemania
Cita clave para acoger a los ucranianos «en el corazón de nuestra democracia liberal»
Por Rosalía Sánchez / Berlín
Con motivo de la reunión de Reikiavik, a la que acudirá el canciller alemán, Olaf Scholz, la gran mayoría de diputados alemanes se han pronunciado a favor de «fortalecer y mejorar los recursos de la institución», en un pleno convocado por los partidos de la 'coalición semáforo'. El portavoz socialdemócrata (SPD) Frank Schwabe precisó que la reunión servirá para acoger a Ucrania, en su esfuerzo contra la invasión rusa, como parte de la familia europea y condenó que países como Rusia, Turquía y el Reino Unido ignoren reiteradamente las sentencias de Estrasburgo.
«En tiempos turbulentos, es un escudo protector contra el desmantelamiento latente de la democracia, la inhumanidad llameante y el autoritarismo rebelde», alabó el también socialdemócrata Derya Türk-Nachbaur, que se refirió al Consejo de Europa como al «corazón de nuestra democracia liberal».
Max Lucks, portavoz de Los Verdes, habló de una «cumbre histórica», en la que se discutirá una nueva visión para el futuro de los Derechos Humanos en Europa. Expresó la esperanza de que la situación en la UE, que es «dramática» en cuanto a las fronteras exteriores, se tenga en cuenta de forma autocrítica y se reconozca que el derecho básico al asilo «se restringe aquí a diario».
El representante de la oposición conservadora de la CDU, Armin Laschet, acentuó que la cumbre, además del asunto de Ucrania, tendrá sobre la mesa la paz en Armenia, Azerbaiyán y también Turquía, una agenda especialmente densa, por lo que abogó por la celebración de más cumbres y más a menudo, que permitan una reposada deliberación sobre todos los focos de atención.
Reino Unido
La agenda de Sunak antepone la inmigración y la amenaza rusa
Por Ivannia Salazar-Saborio / Londres
Rishi Sunak tiene por delante una semana cargada de encuentros diplomáticos que lo llevará a su estreno en el G7 como primer ministro británico. Antes, hoy participará en Islandia en el Consejo de Europa, donde pondrá sobre la mesa los dos temas que, según confirmaron fuentes de Downing Street, son prioritarios ahora mismo en la agenda multilateral del Gobierno británico: la amenaza que representa Rusia y los esfuerzos colectivos para prevenir la inmigración ilegal.
Otras conversaciones se centrarán en el crecimiento económico y la inversión en el Reino Unido, el refuerzo del apoyo a Ucrania y el abordaje de otros desafíos globales críticos. El número 10 detalló en un comunicado que el primer ministro «utilizará sus compromisos en la cumbre para discutir la importancia de fortalecer las fronteras de Europa, abordar la migración ilegal y la amenaza que representa Rusia para salvaguardar nuestra seguridad y prosperidad».
«Esta semana viajaré de Reikiavik a Hiroshima para impulsar la acción global en nuestras prioridades más apremiantes», declaró el 'premier', que añadió que «muchos de los desafíos a los que nos enfrentamos, desde la inflación hasta la migración, deben resolverse trabajando en estrecha colaboración con nuestros socios internacionales».
Italia
Meloni coloca a su país en «primer plano» de la ayuda a Kiev
Por Ángel Gómez Fuentes / Roma
La guerra de Ucrania ha servido a Giorgia Meloni para desafiar ciertas posiciones anteriores soberanistas y euroescépticas, adoptando la misma línea que su antecesor, Mario Draghi, convencido europeísta y promotor de los principios que constituyen la base del Consejo de Europa, como son la democracia, la libertad y el progreso social y económico.
El papel de Mario Draghi fue decisivo para convencer a los principales socios europeos, indecisos inicialmente, sobre la necesidad de acelerar los trámites para acercar Ucrania a la UE e imponer sanciones a Rusia, incluyendo su expulsión del Consejo de Europa. «Son indecentes las sanciones», dijo entonces el presidente ruso, Vladimir Putin. «Indecentes son las masacres rusas», respondió Draghi.
Esa herencia atlantista y europeísta será la que promoverá hoy Meloni en Reikiavik. La primera ministra italiana ha dicho que su país «tiene la intención de desempeñar un papel de primer plano en ayuda, a 360 grados, a Ucrania».
Es significativo que en la minigira europea del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, haya incluido a Roma, además de Berlín, París y Londres, entre las capitales europeas que sostienen especialmente a Kiev. Se prevé que Meloni tenga en Reikiavik una reunión bilateral con Emmanuel Macron para superar recientes polémicas y ataques del Gobierno francés sobre la gestión de la inmigración por el Ejecutivo italiano.