Sánchez escribe una nueva carta para denunciar «un intento de la derecha para derribar al Gobierno» con el informe de la UCO

En esta misiva, Sánchez censura que el informe elaborado por la Unidad Central Operativa, la UCO, de la Guardia Civil que implica a Santos Cerdán en la trama corrupta de adjudicaciones de obra pública haya caído en manos de la derecha en «un intento deliberado para derribar a un gobierno legítimo».

Sánchez se cubre las espaldas asegurando que no conocían el contenido de ese informe demoledor -sobre el que se lleva meses especulando- que se ha llevado por delante al que fue su mano derecha, lo cual «habla de la salud democrática de España» y «demuestra que el Poder Ejecutivo no interfiere en investigaciones que dependen del Poder Judicial, como sí ocurrió en buena parte de la década pasada». Y con esta coletilla final aprovecha el presidente para comenzar un ataque frontal, como viene haciendo desde que se destapó el escándalo, contra el Partido Popular.

Sánchez asegura que para combatir la corrupción apelará «una vez más» a un debate sereno con quienes «quieran sumarse a él para aportar y mejorar», del que ya descarta a la oposición. «Si la derecha se borra de ese debate, como seguramente hará, es porque su prioridad es otra: derribar al gobierno al precio que sea».

El presidente reta de nuevo al PP a presentar una moción de censura y les insta a hacerlo de la forma «coherente» con la que la define la Constitución, presentando un «proyecto alternativo de país». «No lo harán», sentencia Sánchez, pues «tan solo les une lo que pretenden destruir, y no lo que quieren construir».

«Lo único que son capaces de ofrecer pasa por el apoyo de una fuerza de ultraderecha incompatible con el progreso». «Puede que el Partido Popular haya renunciado a defender las conquistas y valores fundamentales de nuestra democracia. Nosotros jamás lo haremos».

Y con ese mismo tono triunfalista, el líder del PSOE le pide a la militancia que «tenga perspectiva» y que no pierdan del horizonte «los grandes asuntos que afectan a la vida de la mayoría -en sanidad, vivienda, pensiones, empleo-». «Desafíos que no se resuelven con titulares ni con linchamientos. Sino con trabajo y políticas públicas justas, moderas y eficaces», asegura Sánchez.

El caso Koldo supone una «decepción enorme», si, pero el presidente insiste en contenerlo en unas pocas manzanas podridas que en ningún caso, según se lee en la carta, afectan a la integridad de la organización. «Soy el primero en pedir perdón por lo que representa. Pero no debemos olvidar de dónde venimos y todo lo que hemos alcanzado en estos años, también en materia de lucha contra la corrupción. Hemos aumentado los niveles de transparencia y endurecido leyes».

El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha respondido a esta carta a la militancia del PSOE a través de sus redes sociales: «Primera carta: su mujer imputada. Segunda carta: su mujer va a declarar. Tercera carta: su número 2 y 3 en el Tribunal Supremo. A más corrupción del PSOE, más cartas de Pedro Sánchez».