Sánchez arremete contra Feijóo ante la cúpula de la CEOE y asegura que buscará una investidura que respete la Constitución

Sánchez se ha comprometido a que si después del previsible fracaso del líder del Partido Popular (PP) recibe el encargo del Rey -tras la preceptiva ronda de contactos con los partidos con representación parlamentaria- trabajará «en cuerpo y alma» para una investidura «auténtica», hablando con los distintos grupos políticos y «agentes sociales». Una eventual investidura que respete y sea «plenamente coherente» -ha señalado sin mencionar en ningún momento la amnistía que piden las fuerzas del independentismo catalán, y por la que aboga abiertamente la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz- «el espíritu y la letra» de la Constitución.

Igualmente, ha asegurado comprometerse a poner en macha «un proyecto político en positivo, de progreso y de convivencia, que garantice la estabilidad del país», ha sintetizado.

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En su primera aparición pública desde el pasado cuatro de septiembre, cuando inauguró el curso político con otro discurso, este en el Ateneo de Madrid, Sánchez -que también se ha pronunciado por primera vez sobre la operación de compra de Telefónica por parte del grupo saudí STC, asegurando que el Ejecutivo garantizará «la soberanía y los intereses estratégicos de España»- ha calificado de «nocivo» el intento de investidura de Feijóo, que se sutanciará en un debate en el Congreso de los Diputados que dará comienzo el próximo 26 de septiembre.

El secretario general del PSOE, que ha evitado a los medios a la entrada a la sede de la CEOE, al día siguiente de la expulsión del partido de Nicolás Redondo Terreros por sus críticas a las alianzas con fuerzas separatistas, reaparecía, como él mismo ha comentado al inicio de su intervención, tras dar negativo en Covid este jueves, una semana después de que su positivo le obligase a cancelar su asistencia a la cumbre del G-20 en La India.

Los últimos minutos de su alocución los ha dedicado a la crítica del presidente del PP, y lo ha hecho señalado a los empresarios que le escuchaban en la sala José María Cuevas de la sede de la patronal: «Este auditorio está integrado por muchas mujeres y hombres que conocen el valor del tiempo. El tiempo es oro, se dice. Esta es una expresión popular que adquiere un sentido casi literal en el mundo de la empresa y los negocios. Un mundo que conoce el valor de los meses, de las semanas, de los días, de las horas, de los minutos, como un factor para aprovechar a la hora de crear oportundades y también crear riqueza en sus entornos. Y desde esa perspectiva me van a permitir que diga que se entiende mal la descomunal pérdida de tiempo de un candidato que, sabiendo de su inacapcidad para lograr una mayoría en el Congreso, ha sometido al país a un periodo de tanta parálisis y también de tanto bloqueo».

Sánchez le ha culpado de estar «más empeñado en impedir otra investidura que en conseguir la suya», ha argumentado. «El tiempo no es de tal o cual candidato, el tiempo es de todos los españoles y españolas, y España tiene cosas muy importantes y urgentes que resolver, y no tiene por qué perder tiempo caprichosamente», ha concluido.