La salida de Ortuzar deja al lendakari sin padrino ante el sector hostil de Esteban

El nombramiento de Esteban pondrá el broche final a una serie de cambios internos capitaneados por el propio Ortuzar y que han venido desarrollándose este último año como consecuencia del declive del PNV tanto en las encuestas como en los cinco comicios celebrados desde 2020, año de la pandemia, con EH Bildu pisándole los talones. Además de la renovación territorial, entre las transformaciones más significativas se encuentra el nombramiento de Pradales como candidato a lendakari para los comicios autonómicos del 21 de abril del año pasado.

Una arriesgada apuesta -sustituir a un peso pesado como Iñigo Urkullu por un desconocido diputado foral-, aunque acertada con la que el líder peneuvista consiguió salvar los muebles en las elecciones y situar a Pradales en Ajuria Enea, gracias a la reedición del pacto de gobierno con el PSOE vasco.

Y en toda esta victoria que está a punto de saborear Aitor Esteban, la figura de Itxaso Atutxa, su mujer y expresidenta del PNV de Vizcaya, ha sido clave para asentar la imagen del portavoz del Congreso como futuro lider de los nacionalistas vascos. Pese a no obtener el apoyo mayoritario de las organizaciones municipales del PNV ('batzokis' en euskera), encargadas de votar a los candidatos en primera vuelta, sorprendió ese segundo puesto (ganó en 70) que obtuvo por detrás de Ortuzar (victoria en 110 'batzokis') y en el que mucho tuvo que ver Atutxa a la hora de movilizar a las bases. Surtió efecto, pues el todavía líder del partido ha decidido que una retirada a tiempo es una victoria y deja la competición para evitar «divisiones internas» en la formación.

La situación en el PNV es ahora sensible con Pradales, la apuesta personal de Ortuzar, en Ajuria Enea y con Aitor Esteban al frente del partido, ya que es bien sabido que el todavía diputado nacional pertenece al sector del exlendakari Urkullo, con quien guarda una estrecha relación.

Ahora, sin el que ha sido su protector durante todos estos meses, el lendakari se verá obligado a entenderse con Esteban. Aun con todo, Pradales ha afrontado con normalidad la situación y aseguró que el partido saldrá más «fuerte y unido» gracias a la decisión de Ortuzar.

La presidencia del PNV es incompatible con desempeñar el cargo de diputado en el Congreso. Por ello, urge al PNV encontrar un sustituto a Esteban como portavoz y líder en la Cámara Baja. La principal candidata que se perfila para el cargo es Idoia Sagastizabal. Mano derecha de Esteban desde 2016 y voz del partido en asuntos económicos, deberá desempeñar la tarea de representar a la formación en el Congreso. Un nombramiento con el que Esteban se aseguraría, además, el control del grupo parlamentario.

El que guarda silencio es Urkullu, que mantiene un perfil bajo desde su marcha y no ha reaccionado públicamente al cambio que está a punto de producirse en la cúspide de su partido. Con tres legislaturas a sus espaldas, el exlendakari, que en su despedida se consideró «un hombre de partido», vio cómo Ortuzar le sustituía por Pradales. En la novena asamblea del PNV, que se celebrará el 29 y el 30 de marzo en San Sebastián, Esteban tomará las riendas del partido.