El PSOE obtuvo un beneficio de 27 millones en plena crisis del Covid
La cuenta de resultados de los socialistas en 2020 y 2021 fue un 432% mayor que la del PP
El partido de Sánchez rentabiliza las elecciones de 2019: se ha embolsado en dos años 93 millones por subvenciones
La demoledora crisis del Covid barrió con negocios y empleos, asfixió la economía y no son pocas las empresas que todavía arrastran sus consecuencias. Sin embargo, en las arcas del PSOE los años del Covid han dejado beneficios de récord. En 2020, ... el año que estalló la pandemia y se hundió la economía, el PSOE declaró un beneficio de 15,31 millones de euros.
Al año siguiente, en 2021, cuando la pandemia seguía azotando al tejido productivo, la cuenta de resultados de los socialistas se anotó otro superávit de 11,84 millones de euros. En total, en los dos años de crisis del Covid, el PSOE ha acumulado unos rendimientos netos de 27,15 millones de euros.
Y todo ello gracias a haber cosechado cifras récord de subvenciones oficiales: 93 millones de euros entre los dos años, un enorme flujo de dinero público que ha aterrizado en las arcas del PSOE y que ha sido su gran trampolín para alcanzar esos beneficios de récord en tiempos de crisis.
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Los datos aparecen recogidos en las cuentas de resultados declaradas por el partido que lidera Pedro Sánchez, cuyos beneficios en el bienio 2020-2021 han sido un 432% mayores a los resultados declarados por el PP.
En 2020, el Partido Popular se anotó un discreto superávit de 770.406 euros. Y en 2021 ascendió a 4,33 millones. Es decir, un agregado de 5,1 millones de beneficio declarado en los dos años de crisis del Covid. Eso sí, en 2019 las cuentas del PP registraron unas pérdidas de 5,73 millones.
Así que, en realidad, ese superávit de los dos últimos años no ha hecho más que capear las pérdidas de 2019. En cómputo global, en el último trienio el PP ha tenido que ajustar sus gastos para compensar números rojos y lograr equilibrio presupuestario.
«Arrimar el hombro»
El PSOE no ha tenido que esmerarse en esa tarea de esquivar pérdidas. Y eso que sus gastos doblan los del PP. La baza de los socialistas es la gran cantidad de subvenciones oficiales que cosechan, muy superiores a las que ha recibido el PP en el bienio 2020-2021.
En plena oleada de Covid, con la economía asfixiada, el presidente del Gobierno y líder del PSOE arremetía contra los populares porque, a su juicio, no «arrimaban el hombro». Sánchez se defendía así cuando la oposición le acusaba de falta de eficacia en la respuesta a la crisis sanitaria y económica del coronavirus. Pero ese 2020, mientras Sánchez exigía insistentemente al PP que «arrimara el hombro», el PSOE se estaba embolsando en subvenciones 18 millones más que los populares. En concreto, las arcas socialistas recaudaron 46,38 millones de euros de dinero público, seis millones más que en 2019 y 9,37 millones más de los que había cosechado en 2018.
En 2021 el volumen de subvenciones que se anotaron los socialistas fue similar al de 2020, otros 46,24 millones de euros, también muy por encima de los 27,76 millones que recibió el Partido Popular.
En suma, en el crítico bienio del Covid 2020-2021, los socialistas ingresaron un total de 92,62 millones de euros de subvenciones públicas, frente a los 55,95 millones que recibieron las arcas populares. Es decir, el PSOE recaudó un 162% más fondos públicos que el PP.
Poder y dinero público
Las subvenciones que reciben los partidos políticos vienen tasadas por la normativa. En síntesis, hay de dos tipos: fondos públicos para financiar el funcionamiento ordinario de los partidos con representación institucional; y fondos públicos para financiar gastos de campañas electorales. Se trata, en ambos casos, de subvenciones cuyos importes están predeterminados en función de los resultados electorales y de la presencia institucional que tienen los distintos partidos en cada momento. Eso sí, ingresar estos fondos públicos es un derecho que tienen los partidos, no una obligación. Nada les impide renunciar en todo o en parte a subvenciones públicas.
En el caso del PSOE, la evolución de los ingresos por subvenciones en los últimos años evidencia el salto que se produjo con las elecciones municipales, autonómicas y generales del año 2019. El partido de Sánchez rentabilizó esas citas electorales con unos resultados que le permitieron ampliar su presencia institucional, consolidar y expandir su cuota de poder a nivel estatal, autonómico y local, y ha aprovechado al máximo los ingresos por subvenciones a los que ha tenido derecho. Ese flujo de dinero público aterrizó en las arcas de los partidos sin sentir los efectos de la crisis del Covid.
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Pedro Sánchez insiste en que no va a adelantar las elecciones generales, que serán en su tiempo ordinario, en las últimas semanas de 2023, año en el que también tocan elecciones autonómicas y municipales. Adelantar o no la cita con las urnas, además del componente político, tiene también una repercusión económica directa para las arcas de los partidos: quienes tienen expectativas de ganar votos y cuota de poder ven los comicios con optimismo por el aumento de ingresos públicos que conllevan para su partido. Pero los que transitan por el declive, como comprobaron PSOE y Podemos en las elecciones andaluzas de junio, la cita con las urnas es vista con temor por la caída de ingresos y de cargos públicos en los que estar asalariado.
El salto que dio el PSOE fue evidente: de ingresar 37 millones de euros por subvenciones en 2018, a recaudar por la misma vía 42,34 millones en 2019 y subir hasta los 46,38 millones en el año de la catástrofe del Covid, el 2020, cifra que prácticamente repitió en 2021.
El PP, sin embargo, recorrió el camino inverso. En 2018 el PP gobernó España durante medio año. Rajoy salió abruptamente de La Moncloa el 1 de junio por la moción de censura de Pedro Sánchez, al que apoyaron los independentistas, lo que permitió también el desembarco de socialistas en una larga lista de altos cargos y asesores en ministerios, organismos varios, empresas públicas...
En 2018, el PP ingresó por subvenciones públicas 40,3 millones de euros. Sin embargo, en 2019 esos ingresos cayeron hasta los 32,11 millones por el nuevo reparto de fuerzas que arrojaron las elecciones generales, autonómicas y municipales que se celebraron aquel año. Ese reparto de fuerzas hizo que en 2020 los ingresos del PP por subvenciones cayeran todavía más, hasta los 28,18 millones, y en 2021 fueron 27,77 millones los que recaudaron por el mismo concepto.
Ingresos por cuotas
Ocupar más o menos poder no solo le supone recibir más o menos subvenciones públicas, también le reporta más o menos ingresos por la parte del sueldo que los cargos públicos transfieren a sus respectivas formaciones políticas. Es una fuente de ingresos millonaria para los grandes partidos, que les reporta tanto o incluso más dinero que las cuotas ordinarias de los afiliados. A más escaños y más gobiernos bajo control, más colocados en cargos oficiales.
Esta fuente de ingresos escaló en el PSOE con su ascenso al poder con la moción de censura de 2018 y las elecciones de 2019. Por «aportaciones de afiliados y cargos públicos» obtuvo en 2020 y en 2021 un total de 11 y 11,46 millones de euros, respectivamente. Por cuotas ordinarias de afiliados declaró unos ingresos, en esos dos mismos años, de 9,97 y 10,62 millones de euros.
En el PP los rendimientos por esas vías son mucho menores que en el PSOE. Así, en 2020 y 2021 los populares declararon unos ingresos por «aportaciones de afiliados y cargos públicos» de 2,59 y 2,42 millones de euros, respectivamente. Y por las cuotas ordinarias de sus afiliados 2,8 y 3,32 millones.
El PSOE gasta el doble
La cantidad de subvenciones que el PSOE recauda en los últimos años le permite mantener holgadamente la estructura del partido, que destaca por su elevado coste. De hecho, el PSOE gasta el doble que el PP en su día a día. Según la cuenta de resultados oficial de los socialistas, sus gastos ordinarios de funcionamiento, sin contar los costes de las campañas electorales, ascendieron en 2021 a 65,79 millones de euros. Fueron diez millones más que en 2020, el año que irrumpió el Covid. Solo en gastos de personal, el PSOE consume una media de 27 millones de euros anuales, según recogen las cuentas de resultados del último bienio.
Por su parte, la estructura de costes del PP ha adelgazado en los últimos cuatro años. En 2018 el funcionamiento ordinario del Partido Popular, sin contar campañas electorales, costaba 42,6 millones de euros. Pero, ante el descenso de los ingresos por subvenciones, decidió recortar gastos de forma considerable. Así que en 2021 el coste de funcionamiento del PP fue de 32,1 millones de euros, 10,5 millones menos que en 2018 y 33,7 millones menos de lo que gastó el PSOE el año pasado.
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De esos 32,1 millones de euros que costó la maquinaria del PP en 2021, 14,8 millones fueron gastos de personal, capítulo que este partido ha ido recortando desde hace años para acomodarlo a su nivel de ingresos. El año pasado, el PP gastó en personal casi cuatro millones de euros menos que en 2018.
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