El PP no sopesa una moción con Junts: «Queremos hacer caer a Sánchez en las urnas»

Las palabras de Alberto Núñez Feijóo este lunes, hablando de que una moción es «una herramienta que puede útil en el contexto adecuado» no anticipaban la posibilidad de utilizar este recurso tras el 9J, al contrario. Desde Génova se ha venido negando esta posibilidad desde hace tiempo y más en los últimos días, en los que la debilidad del Gobierno se ha hecho más patente con la retirada de la Ley del Suelo y la dificultad para sacar adelante otras propuestas legistaltivas.

La respuesta ha sido siempre la misma. «No vamos a llegar al poder gracias al apoyo de Puigdemont. No vamos a promover una moción que le dé aire a Pedro Sánchez», explicaba una persona del comité de dirección al término del último pleno del Congreso. Ahí se acababa de aprobar la ley de Amnistía, lo que afloró las verdaderas intenciones de los socios de investidura del Gobierno, que en lugar de darse por contentos y poner sus votos a disposición de Sánchez para sacar adelante nuevas leyes, anunciaron su intención de seguir adelante con el desafío secesionista.

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Ni siquiera en esa situación habló el PP de moción de censura, conscientes de que no cuentan con los apoyos y que tampoco los habría tras una supuesta negociación. En primer lugar, porque haría falta que Vox accediera a participar con Junts, algo inviable como han reconocido en múltiples ocasiones los de Abascal. La otra opción, la de que PNV pusiera sus votos a disposición de Feijóo, chocaría con el mismo problema, pues los nacionalistas vascos siempre han dicho que no a juntar sus apoyos con los de Vox para ninguna iniciativa.

«La noticia sería que el Partido Popular descartara una moción de censura en lo que queda de legislatura o que dijéramos que la íbamos a promover. Pero no ha pasado ni lo uno ni lo otro. Nuestra vocación es hacer caer a Sánchez en las urnas. Ese, y no otro, es el camino escogido», explican fuentes del PP, que explican que la formación está centrada en las europeas y en lograr un resultado lo suficientemente amplio como para exigir al presidente del Gobierno que convoque elecciones anticipadas. «Votar al PP el 9J acorta la legislatura porque profundizaría en la debilidad electoral de Sánchez y agravaría su debilidad parlamentaria», señalan estas fuentes.

En ese sentido, en el PP están convencidos de que un gran resultado el próximo domingo señalaría definitivamente a un Gobierno como el de Sánchez, salpicado por la corrupción que sitúa a varios de sus cargos como conocedores de la trama del caso Koldo. También la que atañe al entorno más próximo al presidente, cuya mujer continúa siendo investigada en un juzgado de Madrid por sus prácticas profesionales.