El PP se conjura contra Vox: «Si hay que repetir elecciones, se repiten»

Alberto Núñez Feijóo no dudó en responder a la amenaza del líder de Vox, que estos días ha llegado a afirmar que podría exigir que María Guardiola diera un paso al lado para garantizar la presidencia de Extremadura al PP. El líder conservador no solo blindó a la presidenta de la Junta, sino que desdeñó el envite de su principal competidor preguntándose si realmente era una broma el planteamiento. Otros presidentes autonómicos fueron todavía menos prudentes: «Nos piden que quitemos a una presidenta autonómica. Y que cambiemos la candidatura de la persona que va a ganar las elecciones por mucho. Ver para no creer», afirmaba un barón de peso del PP. «Yo tengo claro que hay que ir hasta el final. Y si hay que repetir elecciones, se repiten. Pero ya está bien. Que explique Vox por qué impide a los presidentes del PP gobernar», lanzaba otro dirigente territorial.

Ese «ya está bien» lo encarnaron prácticamente todos los líderes autonómicos que desfilaron este sábado por el Congreso. Coincidieron en que el «objetivo de Vox es ir a por el PP» y alguno anticipó que «su error, como le ocurrió a Ciudadanos, es pensar que pueden llegar a sustituirnos». Y eso, continuó un presidente autonómico, «no va a ocurrir». Todas las miradas están centradas en Extremadura porque será el momento en el que realmente el partido calibre la fuerza de Vox en este nuevo ciclo electoral. De esos resultados dependen muchas cosas. Y, sin duda, condicionarán el resto de citas autonómicas: Castilla y León y Andalucía, y casi con toda seguridad Aragón.

El presidente de esta comunidad, Jorge Azcón, confirmó también este 6 de diciembre que en los próximos días habrá una decisión en firme sobre sus elecciones. ABC ya publicó hace dos meses que sopesaba un adelanto electoral, igual que Guardiola, por no tener presupuestos. Será en los próximos días cuando se vea con los grupos parlamentarios y tenga la certeza de si Vox le va a tumbar las cuentas públicas. Si es así se confirmará el adelanto y los aragoneses irían a las urnas en el mes de febrero.

Este goteo de elecciones, insistieron los presidentes autonómicos, «fortalecerá» al PP y «confirmará la descomposición del PSOE». En el partido de Feijóo están convencidos de que en todas las autonomías se confirmará el proceso de derechización total -la suma de PP y Vox va a ser muy alta- y descuentan una caída en picado de apoyos en el caso de los socialistas. Con todo, ninguno auguró que Pedro Sánchez pueda pensar en adelantarlas. No tienen dudas de que el presidente «mira solo por la situación judicial de su entorno» y «no le ha importado sacrificar a su partido». En Extremadura, manteniendo a Miguel Ángel Gallardo, a pesar de estar al borde del banquillo. Y en Aragón -si se confirma- y Andalucía con las dos ministras más expuestas, Pilar Alegría y María Jesús Montero.

Feijóo también aprovechó el Día de la Constitución para ajustar cuentas. Primero, arremetió duramente contra Sánchez, al que acusó de encabezar el Gobierno «que más ha atacado» la Carta Magna en sus 47 años de vigencia, comprometiéndose a iniciar «una época restituyente» si llega a la Moncloa. En conversación informal con periodistas también dejó claro que, en su opinión, Abascal -que se ausentó del acto, como del resto de grandes días institucionales- «está jugando a cosas muy peligrosas».