Acuerdo de PP y Vox para aprobar los primeros presupuestos de Prohens

A cambio, los populares ceden a la práctica totalidad de las enmiendas presentadas por el partido de Santiago Abascal, entre ellas una partida de 20 millones para aplicar la libre elección de lengua en las aulas el próximo curso, uno de los caballos de batalla del partido.

Además, PP y Vox acuerdan suprimir las subvenciones directas a patronales y sindicatos por valor de 400.000 euros, un dinero que se destinará a fines sociales, según ha avanzado Vox. No obstante, el Gobierno autonómico puede buscar otras fórmulas para adjudicar ayudas a estas organizaciones.

Otra de las enmiendas de Vox aceptadas por el Gobierno regional del PP balear consiste en aumentar hasta los tres millones de euros la eliminación del Impuesto de Patrimonio, que actualmente está en 700.000 euros.

Con 26 diputados y a cuatro escaños de la mayoría absoluta, el gobierno del PP se ha topado con la debilidad de un gobierno en minoría y ante un escenario incierto agravado por la crisis con el presidente de Formentera, Llorenç Córdoba, quien ha retirado su apoyo incondicional al Gobierno del PP y que se niega a dimitir pese a la pérdida de confianza de sus ocho consejeros de Sa Unió, la coalición formada por PP y Compromís que gobierna en Formentera.

El portavoz del PP, Sebastià Sagreras, reconoce que ha aceptado las enmiendas de Vox por «responsabilidad» porque es «más importante el todo que una parte». Según Sagreras, con los siete votos de los diputados de Vox, Baleares tendrá «los primeros presupuestos del cambio que pidieron los ciudadanos en las elecciones autonómicas del 28 de mayo».

La portavoz de Vox en las Islas, Idoia Ribas, valora el cambio de actitud del PP hacia sus propuestas y se reivindica como su socio indispensable con sus siete diputados, tras la marcha de Xisco Cardona. «Ahora sí que los presupuestos reflejan la voluntad de cambio de las urnas», ha defendido Ribas, que recalca que todas estas medidas acordadas responden a «lo fundamental del ideario Vox».

El anuncio ya ha tenido las primeras reacciones por parte de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB), que ha lamentado esta medida y ha recordado que las ayudas públicas del Govern se destinan para financiar proyectos específicos cuyo fin es mejorar la productividad de las empresas y trabajadores.

A la espera de recibir el texto que finalmente se apruebe, desde CAEB han asegurado que «respetan» la decisión que adopte el Parlamento balear y que «seguirán trabajando en beneficio de las empresas de Baleares con independencia política y económica».

En la misma línea, el popular Sagreras ha defendido el papel de los agentes sociales y ha señalado para tranquilizar los ánimos que «sólo se toca una subvención directa y nominal», por lo que, a su juicio, «no es determinante».