La Ertzaintza investiga si el vídeo del payaso que pedía la libertad de etarras constituye «violencia psíquica a menores»

El impulsor de la denuncia es Carlos García, único concejal del PP en Durango. Según ha relatado a ABC, él mismo fue testigo de la actuación donde aproximadamente una treintena de niños y decenas de adultos corean al unísono «presoak kalera», (presos a la calle) que forma parte del estribillo pegadizo de la canción. «Algo así no puede quedar impune», explica García por lo que decidió interponer dos denuncias, una ante la Guardia Civil y otra ante la Ertzaintza.

Dado que entre el público había numerosos menores de corta edad, consideró que en base a la ley 8/2021 de Protección integral de la infancia y la adolescencia, el espectáculo podría considerarse una forma de «violencia psíquica y psicológica» por el «adoctrinamiento» que supone para los menores. En el texto de la denuncia, a la que ha tenido acceso este periódico, argumenta que «alabar y apoyar» a personas condenadas por «gravísimos delitos violentos», puede «afectar severamente al desarrollo normal de las capacidades mentales y de discernir entre el bien y el mal». «Puede causar daños irreparables en los niños y menores», añade.

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Compara lo ocurrido con algunos soniquetes que muchos vascos tienen metidos en la cabeza con letras vinculadas a la izquierda abertzale por haberlas escuchado en ambientes festivos e infantiles. Destaca que no es, en realidad, nada nuevo. Hasta ahora el entorno de ETA utilizaba fiestas como la Semana Grande de Bilbao para compartir sus mensajes. «Aprovechan ese ambiente lúdico para influir en los más jóvenes», lamenta. El problema, añade, es que ahora se dirigen a los más pequeños y «banalizan» un delito tan grave como el terrorismo de ETA. Por todo ello, en la denuncia solicita como medidas cautelarísimas la suspensión de todas las actuaciones previstas del grupo musical.

Según explica el propio García, la Fiscalía de Menores se habría interesado por las denuncias lo que ha impulsado que la Ertzaintza haya abierto las diligentes. Está investigando ya las grabaciones aportadas y también ha tomado declaración como testigo al edil de Durango. La polémica surgió hace dos semanas, después de que el colectivo de víctimas, Covite, denunciara públicamente la existencia de un vídeo infantil vinculada a las organizaciones en favor de los presos de ETA. En ella, el grupo de payasos, muy conocido entre los niños vascos, aparecía con unas llaves simbólicas pidiendo la excarcelación de los presos de ETA.