El asesino de Orio actuó con una escopeta que heredó de su padre

El consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, lo ha confirmado este miércoles por la mañana en una comparecencia ante los medios de comunicación. Según ha explicado, Alberto, que tenía licencia de armas, había manipulado la escopeta para aumentar su efecto. «Tenía licencia de arma en vigor pero se trataba de un arma manipulada al margen de la ley», ha precisado el consejero vasco.

De hecho, fruto de esa manipulación surgió la confusión inicial acerca de lo ocurrido. Los primeros testigos aseguraron haber visto a Alberto con una caja blanca en la mano y poco después, debido a que el cañón había sido recortado, el disparo causó tal estruendo que lo confundieron con una explosión. «El ruido que produce hace creer que se trata de la deflagración de un artefacto casero», ha explicado Erkoreka. Fue después, cuando llegó la policía científica y comenzó a inspeccionar el escenario del crimen cuando se percataron de la presencia de la escopeta.

La conmoción este miércoles en el municipio de Orio era total. Lourdes del Hoyo, de 50 años, era una vecina muy conocida en el pequeño municipio de 6.000 habitantes. Es desde ayer la primera víctima mortal de violencia de género en el país vasco este 2023. Tenía dos hijos, la más pequeña aún menor de edad, que se han quedado huérfanos de la noche a la mañana.

El dolor era especialmente patente en el colegio La Salle de Zarauz, donde todavía estudia la hija adolescente. Sus compañeros han guardado un minuto de silencio en repulsa por lo ocurrido. En un comunicado el centro educativo ha lamentado que la fiesta «llena de color» que tenían prevista coincidiendo con el Día Internacional contra la LEGTBIQ+fobia se haya teñido de negro. «El dolor y la tristeza han invadido nuestro patio», han lamentado. También han querido mandar un mensaje de «apoyo, cariño y solidaridad» a los hijos y familiares de la víctima.

También han sido numerosos los vecinos que se han acercado hasta el banco donde Alberto disparó a Lourdes. Allí han depositado flores y velas en memoria de la víctima. Un hombre que se ha acercado en bicicleta también ha depositado una flor junto a un patito de goma amarillo. En declaraciones a los medios de comunicación, los vecinos, aún en «shock», han explicado que es un suceso que «costará olvidar».

Ninguno de ellos conseguía ocultar su sorpresa por lo ocurrido. Alberto era un hombre muy conocido en la localidad que no tenía antecedentes por violencia de género. Lo habitual, han explicado sus vecinos, era verle «en cuadrilla» por los bares de la localidad haciendo gala de un carácter cordial y afable.

El Ayuntamiento de Orio también ha querido expresas su «dolor» y ha hecho un llamamiento al «respeto», después de que unas primeras imágenes de los cadáveres sin cubrir circularan como la pólvora por redes sociales. «Lo que vivimos ha sido terrible y el impacto que ha provocado en el pueblo, muy duro», han asegurado en un comunicado. Por todo ello, el Consistorio ha acordado decretar tres días de luto.