Marlaska acata la orden del Supremo y restituye al coronel Pérez de los Cobos

La restitución de Pérez de los Cobos pone fin al pulso que libró Grande-Marlaska contra él y que generó gran malestar en la Guardia Civil. El ministro, por medio de la directora general de la Guardia Civil María Gámez, destituyó al coronel por negarse a informarle de una investigación en curso en un Juzgado de Madrid.

En ésta, al frente de la que se encontró la jueza Carmen Rodríguez Medel, figuraba como investigado el ex delegado del Gobierno en la capital, el socialista José Manuel Franco. Concretamente, se abordó por qué autorizó manifestaciones, entre ellas la del Día Internacional de la Mujer, 8-M, al inicio de la pandemia de Covid. Finalmente, la causa acabó archivada para él.

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A pesar de que Interior alegó una «pérdida de confianza» en Pérez de los Cobos para su cese, el Supremo confirmó el pasado marzo que la verdadera razón de su destitución fue que se negó a dar cuenta de un informe de la Guardia Civil incluido en la causa a sus superiores mientras era jefe de la Benemérita en Madrid. Si lo hubiera hecho –pues fue advertido por la jueza de que la información de la causa no podía salir del Juzgado– habría incurrido en revelación de secretos, como defendió.

Por eso recurrió el cese y, en primera instancia, el titular del Juzgado Central de lo Contencioso-Administrativo 8 le dio la razón, considerando que hizo bien en no informar sobre la instrucción. Sin embargo, Interior recurrió ante la Sala Tercera de la Audiencia Nacional, donde se concluyó que no hubo desviación de poder y el cese del cargo, de libre designación, estaba motivado.

Pérez de los Cobos agotó todas las vías y se dirigió al Tribunal Supremo, que un año después de admitir su recurso, obligó a Interior a restituirle en el mismo puesto y abonarle el sueldo que tendría que haber cobrado en éste el tiempo que estuvo destituido. Así, los magistrados del alto tribunal confirmaron la primera sentencia del juez Celestino Salgado de la Audiencia Nacional que vio el cese «ilegal».