Rubias, morenas... y castizas: así se ha gestado el «boom» de la cerveza madrileña

La Cibeles

David Castro renunció a su puesto de directivo en una empresa de telefonía para fundar Cervezas La Cibeles . Este madrileño de 44 años «reconvirtió» su vida para transformar una afición –elaboró sus primeras cervezas en una olla casera– en su oficio. Junto a otros cuatro socios, abrió en Leganés la primera microcervecería de la región. Era 2010. Hoy, apenas seis años después, ya cuenta con 17 empleados. Sus barriles se distribuyen en restaurantes con estrellas Michelin. Sus «rubias» se tiran en más de cuarenta grifos de la capital. Además, exportan a Estados Unidos, Noruega, Suecia, Colombia, Chile, Panamá, China y Japón.

Castro abrió así un derrotero que, poco después, siguieron otros, también con gran acogida entre el público madrileño. De las 340 fábricas españolas, catorce radican en la Comunidad de Madrid , según el censo de la Asociación Española de Cerveceras Artesanales Independientes, institución que preside el dueño de La Cibeles. «Y todo indica a que la tendencia seguirá al alza», augura a ABC el artesano.

La fuente de la diosa inspiró el nombre de esta cerveza autóctona, elaborada con agua –«del Canal de Isabel II», subraya–, levadura, cebada y lúpulo. «Nosotros hicimos lo contrario a lo que te enseñarían en una escuela de negocios: no tenemos una sola receta para atraer a un público masivo, sino que elaboramos un producto para cada persona, momento y plato», explica.

*Las doce variedades de esta cerveza artesanal pionera en la región se fabrican con agua de Madrid. Su sede se sitúa en la calle Petróleo, 34 de Leganés.

Fábrica Maravillas

La Fábrica Maravillas siguió sus pasos e inauguró en noviembre de 2012 un pequeño local del barrio de Malasaña con el mismo objetivo, aunque apostaron por otro modelo de negocio. Su cerveza se fabrica y se sirve en el mismo establecimiento. Exclusivamente. En este «laboratorio» cervecero elaboran entre 4.000 y 6.000 litros de esta bebida al día.

*En la Fábrica Maravillas (calle de Valverde, 29) se elaboran ocho especialidades distintas de cervezas, entre ellas la Valverde y la Malasaña Ale.

Enigma

Pasado el año 2000, Miguel Viñado ya había descubierto el «boom» de la cerveza artesanal en Estados Unidos. Después de varios viajes por trabajo, allí encontró una fuente de inspiración para dar forma a su producto, «dotado de aromas y sabores delicados», que apenas existía en sus homólogas en España. Tras experimentar recetas en casa, decidió regresar a su tierra natal e instalarse en Alcalá de Henares para diseñar allí su propia fábrica: Cervez as Enigma . «Diseñé todos los equipos con los planos de fabricación. Contratamos una empresa para que transformara esos diseños y planos en realidad», relata Viñado, que estudió Química e Ingeniería Industrial. «Hacemos cervezas que nos gustan a nosotros. Ni muy amargas ni muy alcohólicas. Sin químicos. Equilibradas», remarca. Todo con materias primas de la campiña del Henares.

*Instalados en Alcalá de Henares desde septiembre de 2014 (calle Pierre Curie, 18), elaboran tres variedades: Complutum, Premium Ale y Origen.

La Virgen

Fruto de esa misma pasión por la cerveza hecha a mano y de sus periplos por el mundo, César Pascual conoció en San Francisco a otros dos publicistas con los que se embarcó en su mayor aventura: levantar una fábrica donde elaborar sus propias recetas. La llamaron «La Virgen», por esa búsqueda de la cerveza «más pura, sin filtrar, sin químicos» . «En 2011, en plena crisis económica, abrimos una fábrica-bar en Las Rozas. Se nos quedó pequeña. Hoy empleamos a 35 personas», indica Pascual.

*Esta cerveza producida en Las Rozas (Calle de Turín, 13) cuenta con seis modalidades: Madrid lager, Jamonera, Madrid 360, Negra, Veraniega y Castañas.