Las ocurrencias de Manuela Carmena
TATIANA G. RIVAS
Mira que lo advirtió el pasado martes en el hotel Ritz. Que no, que no quería aquel día la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena , iluminar más con una de sus iniciativas para que no se la malinterpretara ni tuviera que sufrir «un chorro ... constante». Dijo entonces que, para interesar al negocio de las bicicletas, se le ocurrían «muchas ideas»: «Pero no quiero decirlas, no sea que vayamos a tener todavía más problemas».
Este jueves no pudo contenerse en París, donde participa estos días en la cumbre sobre el cambio climático (COP21) junto a otros regidores de grandes ciudades como la misma Anne Hidalgo . Ante los micrófonos de la Cadena Cope, la regidora decidió inmortalizar y propalar un proyecto para involucrar a los niños en los planes de limpieza, una de sus obsesiones: «Estamos viendo la posibilidad de iniciar una campaña divertida en la que puedan dar unas tarjetas rojas a sus padres cuando vean que tiran la colilla al suelo, un papel o hacer un concurso para ver quién recoge más colillas o papeles y darles premios. Podemos llevar a cabo las medidas, que sean de entusiasmo y que sean de concienciación de ese terrible problema que son las colillas».
Su plan corrió como la pólvora en los medios de comunicación y en las redes sociales refrescando las otras polémicas iniciativas que ha lanzado la exjueza durante los seis meses que dirige el barco de Cibeles.
1
Cooperativas de madres para limpiar colegios
Tres días después de llegar a Cibeles Carmena propuso entregar la limpieza de los colegios a « cooperativas de madres » cuyos hijos recibieran clase en esos centros y acabar así con los contratos integrales. Este plan lo avanzó en una entrevista a Europa Press hablando en términos de remunicipalizar los servicios. Justificaba la medida porque así las madres limpiaban «algo que les importa y eso a su vez tiene un valor social añadido porque limpias mejor cuando limpias para algo y puedes tener una actitud pedagógica con los estudiantes».
Rápidamente los sindicatos de las contratas del sector y la oposición reaccionaron. Los trabajadores porque veían peligrar sus puestos y el resto de grupos municipales porque atacaba a la economía y revelaba una connotación machista. Carmena rectificó y dijo que serían «padres y madres» los nuevos limpiadores. La preocupación de los empleados de limpieza no se aplacó e hizo que la regidora confesara que solo había sido « una sugerencia ».
2
Universitarios barrenderos para acabar con el botellón
La segunda mujer que gobierna Madrid se ha declarado una apasionada de la cooperación social. Por eso, después de las cooperativas de madres el 2 de octubre se fijó en otro colectivo: los jóvenes. Planteó la posibilidad de convertir a los universitarios en barrenderos ocasionales para luchar contra los efectos del botellón en la Complutense o «eventos juveniles».
3
Aparcamientos disuasorios para mujeres y sus compras
También se criticó a la primera edil el mes pasado cuando en un desayuno con la prensa avanzó que se estaba estudiando construir aparcamientos disuasorios para disminuir el tráfico en la ciudad, pero pensados para mujeres, que incluyeran supermercado, bancos u oficinas de gestión.
4
Monumentos turísticos de Madrid en las servilletas
Entre sus ingenios también llamó la atención en el foro de ABC cuando invitó a poner en las servilletas de los bares y restaurantes monumentos de Madrid como la Puerta de Alcalá para promocionar el turismo.
5
Turismo para quedar con los amigos y jugar al «bridge»
Esta semana también aportó la idea de introducir aspectos novedosos en el turismo y que la ciudad se convierta en un punto de encuentro de amigos que queden a « jugar al bridge» y mantengan tertulias . Ya lo confesó hace unos días: «Me he sentido toda mi vida enormemente feliz con mi imaginación».
6
Concursos para que los niños recojan colillas
Mira que lo advirtió el pasado martes en el hotel Ritz. Que no, que no quería aquel día la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena , iluminar más con una de sus iniciativas para que no se la malinterpretara ni tuviera que sufrir «un chorro constante». Dijo entonces que, para interesar al negocio de las bicicletas, se le ocurrían «muchas ideas»: «Pero no quiero decirlas, no sea que vayamos a tener todavía más problemas».
Este jueves no pudo contenerse en París, donde participa estos días en la cumbre sobre el cambio climático (COP21) junto a otros regidores de grandes ciudades como la misma Anne Hidalgo . Ante los micrófonos de la Cadena Cope, la regidora decidió inmortalizar y propalar un proyecto para involucrar a los niños en los planes de limpieza, una de sus obsesiones: «Estamos viendo la posibilidad de iniciar una campaña divertida en la que puedan dar unas tarjetas rojas a sus padres cuando vean que tiran la colilla al suelo, un papel o hacer un concurso para ver quién recoge más colillas o papeles y darles premios. Podemos llevar a cabo las medidas, que sean de entusiasmo y que sean de concienciación de ese terrible problema que son las colillas».
Su plan corrió como la pólvora en los medios de comunicación y en las redes sociales refrescando las otras polémicas iniciativas que ha lanzado la exjueza durante los seis meses que dirige el barco de Cibeles.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete