Quién es Roberto Sotomayor, el exatleta que enamoró a Pablo Iglesias y ataca sin piedad a Pablo Motos y Ana Rosa Quintana

Sotomayor empezó a entrenar en un polideportivo del barrio madrileño de La Concepción. No fue, sin embargo, el único club por el que pasó el exatleta, que también compitió en las filas del Club de Atletismo Boadilla del Monte y la Asociación Atlética Moratalaz. A pesar de esto, sus mejores resultados llegarían lejos de su tierra natal: fue el Pamplona Atlético quien le dio la oportunidad de brillar cuando ya había superado los 30 años.

Gracias a su capacidad de superación, el deportista madrileño fue 5 veces campeón de España y 3 veces de Europa en categoría M-35, mientras, a la vez, compaginaba los entrenamientos y las carreras con un trabajo como dependiente. En esta época, Sotomayor se codeó con campeones, ganó oros, denunció el dopaje y la discriminación de la mujer y, en 2019, cargando con tres operaciones en el tendón de Aquiles, dejó el deporte profesional.

Desde hace unos años, el atleta ha dejado atrás las pistas de atletismo para dar el salto a la tarima política, llegando ahora a encabezar la candidatura de Podemos al Ayuntamiento de Madrid.

En 2021, Sotomayor integró las listas de Podemos para el Consejo Ciudadano Estatal y, el pasado septiembre, encabezó la primera candidatura morada que concurrirá a las urnas capitalinas. Tras el portazo de Más Madrid a unir fuerzas, el tricampeón de Europa lidera las marcas de Podemos, Izquierda Unida y Alianza Verde.

Su pasado político, sin embargo, se gestó hace muchos años. «He sido siempre atleta y político», dijo el pasado octubre, en una entrevista con 'El País'. Es cierto. Corría y se manifestaba.

Primero, en las protestas de principios de milenio en contra de la guerra de Irak. Su decepción con las políticas socialistas tras la crisis financiera de 2008 tornó en indignación. Sotomayor se volcó en el 15M, el movimiento ciudadano que cargó contra el bipartidismo y que auparía a Pablo Iglesias y a Podemos. Por entonces, compaginaba su carrera deportiva con turnos de ocho horas en El Corte Inglés, en el departamento de sastrería de caballeros.

La ideología de izquierdas también la llevaba en la sangre: su padre militaba en el Partido Comunista y era sindicalista en CCOO, mientras que su madre lo hacía en el PSOE.

Noticia Relacionada

Roberto Sotomayor: «Almeida está con un bol de palomitas disfrutando de cómo se pelea la izquierda»

Cris de Quiroga

El exatleta y candidato de Podemos a la alcaldía de Madrid promete alquileres por menos de 400 euros y un modelo de vivienda similar al de Barcelona

Hoy, alejado de las pistas de atletismo, Sotomayor se mueve en política con la misma visceralidad con que afrontaba los metros lisos. Durante esta campaña electoral ya se ha apropiado del tono gamberro que caracteriza a los morados, de los ataques sin cuartel al PP. «Almeida es un facha que encabeza un Gobierno homófobo», lanzó en contra del candidato popular en un mitin.

La semana pasada, en pleno barrio de Salamanca, el candidato colgó una lona: «Los cayetanos de este barrio han tenido un alcalde con dedicación exclusiva estos cuatro años». Estalló la polémica. Sotomayor contestó: «El único pozo de odio es el del mandato de Almeida, que ha destrozado los servicios públicos en Madrid».

Las últimas polémicas en las que se ha visto envuelto el candidato madrileño también son prueba de este afán crítico. Así, hace apenas unos días que el político calificaba a Ana Rosa Quintana de «periodista corrupta» por lanzar «fake news y bulos a diario». Además, aseguró durante un mitin que estaba dispuesto a quitar la Medalla de Honor de Madrid concedida a la presentadora de televisión: «¡Corrupta! ¡Te voy a quitar la medalla cuando llegue al Ayuntamiento!».

No es, sin embargo, el único enganchón del exatleta con la prensa crítica con Podemos. Sotomayor también cargó contra el presentador de 'El Hormiguero', Pablo Motos, al que afirmó que «le parará los pies» por «insultar a personas con dignidad por Pilar Lima», la candidata de Unidas Podemos a la Alcaldía de Valencia.

Sus propuestas estrella: alquileres públicos por menos de 400 euros y un recargo del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) a los pisos vacíos, que también propone recuperar mediante el tanteo y el retracto. Sotomayor quiere erradicar todas las casas de apuestas de la ciudad, otra de las batallas que procede de sus años de deportista, asfixiándolas a inspecciones, y su receta para preparar Madrid ante las olas de calor contempla 'playas' en cada barrio, un 30% más de árboles y que los funcionarios no trabajen en las horas más calurosas. Las encuestas vaticinan que superará el umbral del 5% de los votos. Es el esprint final y Sotomayor pelea con su lema por hacerse un hueco en Cibeles: «Hay que arreglar Madrid corriendo».