El rifirrafe por la colleja de Florentino Pérez a Almeida y el dardo de Monasterio a García: las anécdotas del último debate en Madrid
La ausencia de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, no evitó que fuera un cruce de palabras con tensión y momentos para el recuerdo
La pregunta indiscreta: 20 cosas que no sabías de Rocío Monasterio
El último debate de los candidatos autonómicos -con la notable ausencia de Isabel Díaz Ayuso, que dio que hablar- sirvió para dejarnos numerosas imágenes, cruces de palabras y anécdotas para el recuerdo. En lugar de la presidenta madrileña, acudió su número dos, Alfonso Serrano ( ... PP), quien plantó batalla ante las embestidas que le llegaban de ambos lados del espectro político.
Serrano estuvo ágil en ciertos momentos, como cuando replicó un ataque de Mónica García (Más Madrid), reprochando la falta de habilidades a la hora de poder dirigir una comunidad como la madrileña, criticando que en el programa electoral de Más Madrid, al hablar de políticas fiscales, se equivocan en la suma: «Un partido que suma peor que mi hijo de 9 años no puede gestionar una comunidad autónoma», espetó a la candidata de la izquierda.
Almeida pide una mayoría amplia para evitar la «pinza» del PSOE y Vox y acabar con el sanchismo
Mariano CallejaAyuso advierte de que «no es momento de flaquear ni dividirse»
Así, las anécdotas gobernaron la atmósfera del último debate antes de los comicios del 28M. Por ejemplo, Alejandra Jacinto (Unidas Podemos-IU) llegó a las instalaciones de RTVE con un chaleco naranja de los que usan los vecinos que protestan por las obras de la línea 7B y sus consecuencias catastróficas en varios edificios de viviendas. Dentro del plató ya se había desprendido de él, pero sí que portaba una camiseta con el logo de Idealista y un artículo de la Constitución, concretamente el del derecho a la vivienda.
Precisamente, ya en el debate, Jacinto quiso hacerse con el protagonismo comenzando con una intervención poética, jugando con las canciones de diferentes artistas: «Quiero a Madrid, aunque vivamos entre Estrecho y Alvarado en un piso de 30 metros cuadrados. Quiero a las Lady Madrid, a las emperatrices de Lavapiés y a las Estanqueras de Vallecas. Quiero al Madrid donde sus niñas ya no quieren ser Princesas y ahora quieren ser presidentas. Quiero a Madrid libre de chulos que castigan...».
A lo largo de las intervenciones, Ayuso fue la diana de todos los partidos, pese no estar en plató. Hasta en una veintena de ocasiones se hicieron referencias a que la presidenta autonómica no estaba presente: «Ayuso la ausente», la tildaron.
Fue, básicamente, un todos contra el PP. Hasta el presentador, Xabier Fortes, cargó contra el partido. Cuando Alfonso Serrano recordó que en otros debates que no ha habido el presidente, como el caso de Page o Puig, RTVE había decidido suspender el debate, pero en Madrid lo mantuvo, el moderador le respondió que era porque los otros candidatos renunciaron a ir en esos casos.
Pero hubo más. La ya famosa colleja del presidente de ACS y del Real Madrid, Florentino Pérez, al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, durante el recibimiento a los campeones de europeos de baloncesto, formó parte del cruce de dardos, azuzado por los representantes de la izquierda, como Jacinto.
El 'zasca' de la noche se lo apuntó la candidata de Vox, Rocío Monasterio, quien le recordó a Mónica García su polémica en 2021 por tener dos fuentes de ingresos. «¿De qué gestión habla, si usted no se enteró de que cobraba dos sueldos?», le respondió Monasterio. «Con los 115 millones de euros en edificios de lujo del Gobierno se podrían construir 31 centros de salud», añadió durante el debate.
Ya para concluir, la propia Monasterio reprochó a la izquierda que «han traicionado a los barrios y solo les queda comprar los votos, como en Melilla».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete