El rey del cachopo desvela por primera vez la localización de los restos de Heidi Paz, cómo la mató y quién la desmembró

En la carta que ha enviado a la Audiencia Provincial de Madrid, Román incluía el plano dibujado a mano de la zona en la supuestamente se encuentran los restos de Heidi. «El paraje es conocido popularmente como Las Cárcavas, cerca del parque arqueológico, antes de cruzar el puente sobre el río Guadarrama, en una zona formada por montañitas situadas a unos 500 metros del parking, frente al merendero, a la izquierda del puente, la fuente y el arroyo seco», detalla, aunque asegura que no conoce el lugar exacto dado que no acompañó a su familiar, Miguel, ya que consideraron que lo más conveniente era que el reo simulara «una vida lo más normal posible».

Hace ya un año, en marzo de 2024, el ya condenado a 15 años de prisión por el homicidio de su pareja envió una carta a este mismo tribunal confesando la autoría del crimen de la hondureña Heidi Paz, con la intención de conseguir beneficios penitenciarios. A través de este escrito, que envió sin consultar a su abogada, expresó su arrepentimiento y pidió perdón a la familia. Sin embargo, no mencionaba el paradero de los restos de esta mujer.

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Ahora, relata que la muerte se produjo en «el transcurso de una absurda discusión» por asuntos económicos en la nave donde se halló la maleta que contenía su torso. Según la versión plasmada en esa carta, la mujer cogió una pistola y en el intentó de quitársela, «el arma se disparó fatalmente, falleciendo instantáneamente pues aquel nefasto y único disparo impactó en su cabeza, sin orificio de salida».

Fue entonces cuando, al comprobar que estaba muerta en una de sus naves ubicadas en el distrito de Usera, pidió consejo a su tío ya fallecido. El familiar de Román, que según asegura en esta carta era médico forense de profesión, fue quien la descuartizó y enterró sus retos.

«Tomamos la tremendamente equivocada y errónea decisión de ocultar lo sucedido, deshaciéndonos del arma y el cadáver», admite. Ambos acordaron que ocultarían el cadáver en Carranque, de donde era natural Miguel y que conocían desde la niñez.

«Pido sinceramente perdón a la familia de Heidi por este actuar y con esta explicación no quiero reducir ni aminorar lo más mínimo mi responsabilidad, que asumo absolutamente y con todas sus consecuencias», agrega en el escrito.

Días después del homicidio, se encontró el torso de la víctima en el interior de una maleta calcinada en el lugar del crimen, que presentaba el ADN de Román y de su pareja.

En 2021, la magistrada que ha presidido la vista oral del juicio con jurado popular de la Audiencia Provincial de Madrid César Román fue condenado por la máxima pena por el homicidio de su pareja con la concurrencia de las agravantes de parentesco y de género. No fue acusado de asesinato porque, al no haberse hallado más que una parte del cadáver, era imposible determinar cómo y con qué mató a la chica. La defensa de Román recurrió esta decisión y el Tribunal Superior de Justicia de Madrid confirmó el veredicto del tribunal que le condenó en primera instancia. En diciembre de 2022, el Tribunal Supremo volvió a avalar lo decidido por la Audiencia Provincial de Madrid.

La Justicia declaró probado que César mató a Heidi la madrugada del 5 de agosto de 2018 en el piso que había alquilado en la calle López Grass del distrito de Vallecas. Hasta ahora, el empresario defendía que detrás del asesinato había una mafia policial y que su expareja se dedicaba al 'vuelco' de drogas, una versión que ahora desmiente.