Refuerzo policial en Barajas para evitar un nuevo caos ante el aluvión de más de 50.000 pasajeros

Precisamente, se reforzarán los efectivos para agilizar los controles y mejorar la capacidad de respuesta ante los picos de demanda. Y ello, pese a que el propio delegado aseguró que el miércoles «hubo policía en todo momento», con las 16 cabinas abiertas y dos agentes en cada una, lo que significa que el problema va más allá. Según ha podido saber ABC, el tramo crítico se produce entre las 11 y las 12 del mediodía, y no solo en la terminal de salidas, ya que en las entradas a territorio nacional también es habitual que se produzcan aglomeraciones.

«Ocurre que en determinadas fechas, el interés de Aena es meter todos los vuelos en el mismo horario porque a ellos les interesa vender billetes», sostienen desde el Sindicato Unificado de Policía (SUP), convencidos de que es la infraestructura lo que falla. Es más, advierten de que en este campo «Aena colisiona mucho con la Policía, no dotan de medidas de seguridad a las salas y tienen la tendencia a decir que no hay agentes siempre que pasa algo».

En paralelo, el sindicato Jupol coincide en señalar la querencia de Aena a colocar los vuelos internacionales hacia la hora del mediodía, y apunta también a que en días como el del miércoles la infraestructura actual no es suficiente. «Todos los puestos disponibles estaban ocupados por policías, no había ninguno vacío», subraya su portavoz Ibón Domínguez, quien advierte de la necesidad de una mayor organización y planificación por parte del gestor aeroportuario.

Añade, además, que los equipos automáticos de control de fronteras, instalados en la base hace casi una década tras una inversión de unos 90 millones de euros, «son francamente mejorables». «No terminan de funcionar bien, más que agilizar el trabajo, lo entorpece», denuncia el representante de Jupol. Con todo, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, reiteró ayer que la mecha se prendió por «un fallo informático que determinó la no conexión de bases de datos policiales».

Su departamento señala como causante del suceso expresamente al fallo informático porque asegura que desde el pasado 30 de junio se han incorporado unos 260 agentes más a la infraestructura para reforzarla de cara a la temporada estival, probablemente el periodo más crítico del año. No descartan, eso sí, que se sigan produciendo aglomeraciones en momentos donde haya programados varios vuelos extracomunitarios en un corto espacio de tiempo como dicen que también ocurrió el pasado miércoles. Por su parte, el responsable de la infraestructura Aena también habla sobre el suceso como un hecho puntual y dice que el embudo en el filtro de inmigración ya fue subsanado por la Policía Nacional.

Por fortuna, ayer no se registró ninguna incidencia reseñable en el control de pasaportes de la T4S y la jornada transcurrió con absoluta normalidad. «Todas las cabinas estaban ocupadas por agentes de la Policía Nacional», remarcaron fuentes de las aerolíneas a este periódico. Aún así, las compañías aéreas siguen con la mosca detrás de la oreja ante la posibilidad de que las largas colas vuelvan a repetirse y compliquen su operativa como ya pasara de manera recurrente años atrás.

Según fuentes del sector, fueron alrededor de 1.000 pasajeros los que perdieron un vuelo coincidiendo con las grandes aglomeraciones del miércoles, aunque no concretaron cifra exacta porque desconocen si parte de ellos no embarcaron por motivos ajenos a esta circunstancia. Un hecho que les obligó a reubicar en otros aviones a todos los afectados a lo largo de toda esa jornada y del día de ayer.