Rebelión parlamentaria del PSOE, que da portazo a otra comisión en la Asamblea de Madrid

La izquierda choca todas las semanas contra la mayoría absoluta del PP de Ayuso en la Asamblea de Madrid y ante esa realidad ha optado por no participar en comisiones cuando no están de acuerdo con su contenido y objeto. El pasado 12 de febrero, Más Madrid y el PSOE anunciaron su abandono de la comisión de investigación sobre los supuestos tratos de favor de la Universidad Complutense a Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno. El PP había anunciado la citación de Pedro Sánchez para que compareciera en la comisión, y la izquierda dio un primer portazo, con una denuncia por el «circo mediático» de «la derecha y la ultraderecha».

Los diputados de la izquierda no participaron en las dos últimas sesiones de trabajo de la comisión, en la que finalmente no compareció Pedro Sánchez en una decisión avalada por el Consejo de Estado. El PSOE y Más Madrid tampoco estarán presentes en el debate de las conclusiones. «No vamos a volver», zanjaron.

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Unas semanas después, el PP registró la solicitud de una comisión de estudio para el análisis de las consecuencias que tendrá para los madrileños el llamado 'Acuerdo Bilateral del Concierto Singular de Cataluña'. En esa comisión se estudiarían los efectos que tendrá ese acuerdo sobre la financiación de los servicios públicos en la Comunidad de Madrid, así como el proyecto de condonación de la deuda pública a Cataluña y las demás comunidades. Según publicó ABC, los madrileños pagarán 500 euros por cabeza por la quita a Cataluña. La constitución de esta comisión ha pasado ya todos los filtros parlamentarios, después de que el Pleno diera el último visto bueno el pasado jueves, con el voto en contra del PSOE y Más Madrid. Estos partidos habían propuesto sus propias comisiones, más a su medida, pero la mayoría del PP las tumbó.

Ahora, el Grupo Socialista ha decidido no participar en la comisión promovida por el PP, ya que, a su juicio, se trata de una iniciativa que «solo busca generar un enfrentamiento partidista y atacar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez». Los socialistas subrayan que la Asamblea de Madrid no es el foro para analizar un «acuerdo entre dos partidos». En una nota, el PSOE explica que no participará en ese «circo mediático impulsado por el PP», cuyo único objetivo, a su juicio, es «socavar la credibilidad del Gobierno de España y ocultar la nefasta gestión de la señora Ayuso en la Comunidad de Madrid.

Los socialistas denuncian, además, que el PP ha rechazado su petición de comparecencia de Isabel Díaz Ayuso tras la última Conferencia de Presidentes, que se celebró en diciembre en Santander. El portavoz de los populares replicó que «después de tres meses», no es el momento de pedir la comparecencia de la presidenta. La próxima vez, dijo, que lo pidan antes.

A pesar de no querer participar en la comisión parlamentaria, el PSOE recuerda su posición sobre la condonación de deuda a las comunidades: «Supone un alivio económico para la Comunidad de 8.644 millones de euros y un ahorro de más de 315 millones solo en intereses».

En este caso, la izquierda no ha dado el portazo de forma conjunta. Más Madrid fue tajante: «Nos quedamos». Su portavoz, Manuela Bergerot, explicó que «Más Madrid va a participar en la comisión y aprovechar cada resquicio para discutir el modelo fiscal madrileño y proponer alternativas basadas en datos y evidencia». «Insistimos: el problema fiscal madrileño es que los que más tienen no aportan al bienestar del conjunto, nunca un problema con otros territorios de España».

Fuentes del Grupo parlamentario Popular señalan que «el PSOE de Madrid vuelve a elegir a Sánchez frente a los madrileños». «No quieren, o no pueden, explicar por qué los madrileños tienen que pagar con su trabajo para que siga la fiesta corrupta del independentismo. No van a participar porque no pueden explicar la infamia de aumentar nuestra deuda para pagarle el alquiler de la Moncloa a Pedro Sánchez», sostienen en el PP, con una advertencia: «Los expertos pasarán por la comisión a explicarnos este acuerdo esté el PSOE o no».

La comisión tendrá seis meses para desarrollar sus trabajos, un tiempo que puede prorrogarse otro medio año. Después se elaborará un dictamen de conclusiones y propuestas que se harán llegar a los organismos nacionales, de la Unión Europea e internacionales interesados «en los peligros de la fragmentación de la soberanía nacional española, el control del fraude en sus finanzas públicas, la adecuada financiación de todas las regiones españolas, y la integridad del Estado de Derecho».