La primera medida de Almeida sin Ortega Smith: desbloquear las normas urbanísticas
El PP aprobará la modificación del Plan General de Ordenación Urbana de 1997 que Vox atascó el pasado diciembre
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La tramitación de las normas urbanísticas en el Ayuntamiento de Madrid marchaba sin imprevistos hasta el pasado diciembre. Vox, que hacía meses que se había cerrado en banda a negociar con el PP, presupuestos incluidos, votó en contra en la comisión de Desarrollo Urbano, ... el último paso antes de elevar el documento de 1.800 páginas al pleno. Las siguientes semanas hubo reuniones, pero el grupo municipal de Vox no dio su brazo a torcer. Las promotoras pidieron una tregua porque la parálisis normativa podía comprometer sus proyectos inmobiliarios. Hasta este domingo. La victoria indiscutible de Almeida en las urnas ha roto sus ataduras y, tras meses de retraso, el desbloqueo de las normas urbanísticas será inminente.
La modificación del Plan General de Ordenación Urbana de 1997 se aprobará una vez se conforme el nuevo Gobierno de Cibeles, según confirman a ABC fuentes del PP. Almeida será investido alcalde en el pleno de investidura del 17 de junio, el mismo día que se celebrará la primera Junta de Gobierno del mandato para repartir las distintas áreas municipales entre los concejales; aún no hay detalles de la nueva configuración. En cuanto a las normas urbanísticas, Almeida puede propiciar el desbloqueo en el próximo pleno ordinario del calendario, en el mes de julio. Con su mayoría absoluta, 29 escaños, un umbral que ningún partido ha superado desde los tiempos de Alberto Ruiz Gallardón.
La modificación de las normas urbanísticas comenzó el pasado verano, cuando el Gobierno bicéfalo de PP y Ciudadanos dio luz verde al borrador con los votos de Vox. A final de año, el 27 de diciembre, el grupo de Ortega Smith frenó la tramitación. «Resulta que las normas tienen una serie de condicionantes absurdos que nada tienen que ver con las cuestiones técnicas, lo que llaman la perspectiva de género o la aplicación de la agenda 2030», justificó el portavoz en una entrevista con ABC. En la última reunión que mantuvieron con el delegado de Desarrollo Urbano, Mariano Fuentes (CS), el concejal fue tajante: «No se cambiará ni una coma».
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A pesar de sus argumentos, los liberales siempre vieron la cerrazón de Vox como una estrategia para apartarlos del Gobierno y negociar exclusivamente con el PP. A principios de marzo, Ortega Smith pidió sentarse a la mesa con el alcalde y dio un portazo al responsable de Desarrollo Urbano. Literalmente. Se opuso a que Fuentes participara en la reunión y, a la salida, el portavoz de Vox tendió la mano a Almeida para un futuro acuerdo de coalición. Pero las urnas han trastocado sus planes. Aunque Ortega Smith ha sumado un concejal más (5 en total), la mayoría absoluta anula cualquier pacto. Y Almeida cuenta con la fuerza política suficiente para aprobar, por fin, las normas urbanísticas. También para descongelar el soterramiento de la A-5, su promesa electoral de 2019 y una cuenta pendiente.
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