La portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid pide autonomía frente al poder absoluto del sanchismo

Entre los 27 diputados del Grupo Socialista, Óscar López eligió a Mar Espinar para plantar cara a Ayuso en el Parlamento madrileño y tratar de desgastar al máximo a la presidenta regional. La experiencia como portavoz municipal en Cibeles avala a Espinar, y también un estilo político con unas formas que a veces se parecen bastante a las de la propia Ayuso, por su espontaneidad, impulsividad y descaro en el debate. Espinar ha pedido al secretario general del PSOE madrileño una sola cosa: «Autonomía política». «¡Qué menos!», comentan algunos diputados socialistas. Pero algo que suena tan básico está bastante más alejado de la realidad de lo que parece.

Frente a la pretensión de Espinar de poder actuar con autonomía está la nueva número dos del PSOE de Madrid, Pilar Sánchez Acera, a quien Óscar López 'premió' con el puesto de secretaria de Organización y que fue recibida con una ovación por la mayoría de delegados en el último congreso regional del partido. Sánchez Acera saltó al foco informativo cuando ABC desveló su conversación con Juan Lobato en la que pidió a este que utiliza información confidencial sobre el novio de Ayuso en el Pleno de la Asamblea para atacar a la presidenta. Lobato llevó la conversación de WhatsApp a la Notaría y el partido le forzó a dimitir.

Ahora, Lobato no está en el Pleno de la Asamblea, al menos esta semana. Según explicaron fuentes socialistas, llamó a la secretaría general para justificar su ausencia al encontrarse en Melilla en un curso sobre Defensa Nacional, al que se inscribió a través del Senado. El que fue su escaño como portavoz está ocupado ahora por Mar Espinar, y en el asiento que tuvo después de dimitir, en la segunda fila, se sentó ayer el nuevo portavoz del partido, Javier Guardiola, que ha entrado en el equipo de López por la puerta grande.

Lobato tendrá que esperar a la decisión que tome la dirección del Grupo Socialista sobre su nuevo escaño y su nueva función en la Asamblea, si es que tiene alguna. El Grupo se reúne este viernes y podría tomar las primeras decisiones sobre su organización. Pero cualquier medida que tome estará bien vigilada desde fuera de la Asamblea por la número dos de López, Pilar Sánchez Acerca, de quien algunos diputados socialistas hablan ya como «la mano de hierro».

«Ya está moviendo los hilos del partido y del grupo parlamentario. Tiene el máximo poder, con el visto bueno de Óscar López», destacan fuentes socialistas consultadas por ABC. Sánchez Acera fue la jefa de gabinete de Óscar López cuando este fue, a su vez, jefe de gabinete en La Moncloa, y siempre ha sido su mano derecha. En las filas del Grupo Socialista comentan que esa 'mano de hierro' se está dejando ver en el «registro de iniciativas, en los mensajes de los discursos, en la organización de las comisiones o en los recursos del grupo».

«Está insistiendo mucho con el tema de Quirón», comentan esas fuentes parlamentarias del PSOE. La relación del novio de Ayuso con el Grupo Quirón, y este a su vez con la Comunidad de Madrid, forma parte ya del argumentario habitual del PSOE madrileño contra la presidenta regional. Es un mensaje en el que coinciden el PSOE y Más Madrid, en una carrera por ver quién es más antiAyuso y ganarse al público de la izquierda. Lo mismo ocurre con los muertos en las residencias de mayores durante la pandemia, un asunto al que los diputados recurrieron en el Pleno una y otra vez con insistencia para lanzarlo contra Ayuso.

En el Grupo Socialista tienen claro que la nueva portavoz parlamentaria «no va a tener margen de actuación propia», porque no se lo van a permitir. En su primer debate con Ayuso, destacaron que Mar Espinar tuvo «un tono castizo», con un mensaje en el que aseguró que ella está ahí para hablar de Madrid y solo de Madrid: «No sabemos si será capaz de mantenerlo y conjugarlo con el papel que le corresponde y que tendrá que cumplir: ser la voz de Óscar López en la Asamblea».

Desde su escaño de portavoz, junto a los portavoces adjuntos, Fernando Fernández y Jesús Celada, Espinar preguntó a Ayuso por su política de comunicación, una cuestión que ya estaba registrada antes de que llegara a su puesto. «Podría empezar sin más con usted, señora Ayuso, pero como soy muy del Atleti valoro muchísimo el trabajo de los demás, y por eso mis primeras palabras como portavoz son de agradecimiento a Óscar López, por la confianza, a mi grupo y en especial al señor Celada (anterior portavoz) y a la señora Bernardo (anterior secretaria de Organización)». De Lobato no dijo ni una palabra.

«Solo me importa que lo que hagamos aquí sirva para construir un Madrid mejor. Partido a partido. Vamos al lío. Ojalá seamos capaces de demostrar usted y yo que son muchas más las cosas que nos unen que las que nos separan. Ojalá que las chispas que salten no acaben en incendio», subrayó Espinar. «Hablemos de política madrileña. Si usted quiere hablar de Pedro Sánchez, de Venezuela, de la confederación liberal intergaláctica solo recordarle que yo soy Mar Espinar y no Ana Rosa Quintana».

Y como la pregunta era, en realidad, sobre la política de comunicación, preguntó a Ayuso por qué con el dinero de los madrileños la productora de Ana Rosa Quintana «lleva facturados más de 10 millones de euros» y por qué «con dinero público siguen alimentando a los escorpiones que propagan bulos». «Y es muy importante que diga por qué no quiere debatir con el secretario general de los socialistas de Madrid. A ver si los que se han 'cagao' son ustedes».

En su respuesta, Ayuso dio la enhorabuena a Espinar por su nueva responsabilidad y le dio un consejo: «Cinco portavoces, cinco delegados del Gobierno y 45 ministros más tarde, créame esta recomendación es buena: insúlteme mucho, todo lo que pueda, y es más, insúlteme en lo personal todo el tiempo, porque si no va a durar lo mismo que su anterior portavoz, que no es el señor Lobato, es otro que ha habido entre medias que era bastante educado y que quería llegar siempre a un consenso. Insúlteme todo lo que pueda, le irá muy bien en el sanchismo».

Ayuso pidió al PSOE que evite dar elecciones de nada y lanzó un dardo por el caso del «hemanísimo», en referencia al hermano de Pedro Sánchez, noticia esa misma mañana por renunciar a su cargo en la Diputación de Badajoz. «Nosotros no tenemos a nadie en situaciones como el hermanísimo que, por favor, ¿Alguien le podría decir ahora dónde está la oficina cuando vaya a despedirse? Y si los compañeros le invitan a una caña de despedida, pues tendrá una gran oportunidad para verles y conocerles en persona».

«Así que les animo, por todos los casos que les acechan, por todas las situaciones que tengan, que; por lo menos no nos den lecciones. Nos dan consejos, nos dan lecciones y yo creo que hace falta un poquito más de humildad por su parte», concluyó.