Los polideportivos municipales de la Ciudad del Deporte estarán construidos a finales de 2026

El proyecto se construye sobre cinco parcelas propiedad del Ayuntamiento de Madrid: tres se cederán al Atlético durante 75 años y otras dos permanecerán bajo gestión municipal. Son estas dos parcelas las que inician los trabajos con un plazo de ejecución de 24 meses y una inversión de 25 millones de euros. Aunque la Ciudad del Deporte, que incluirá un miniestadio para 7.000 personas, una playa artificial para surfear, un rocódromo y un centro comercial, superará los 300 millones de euros. Todo sufragado por el club rojiblanco.

Las dos parcelas municipales representan el 22,6% de la superficie del complejo, varias instalaciones deportivas en una superficie de 60.000 metros cuadrados. En la primera parcela se levantará una pista de atletismo reglamentaria de ocho calles, que podrá acoger campeonatos oficiales, y en su centro un campo de fútbol 11, que a su vez será divisible en dos campos de fútbol 7. El mismo terreno contará con un campo adicional de fútbol 11, otro de fútbol 7 y una pista de atletismo cubierta de calentamiento de 110 metros, según han detallado desde el Área de Obras y Equipamientos.

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Sara Medialdea

La segunda parcela que, una vez finalizada, se entregará al consistorio para su gestión, contempla cuatro pistas polideportivas cubiertas para la práctica de deportes de equipo como balonmano, fútbol sala o voleibol, entre otros, además de cuatro pistas de pádel descubiertas. Estas dos parcelas «actualmente infrautilizadas», ha señalado Almeida durante el acto de colocación de esa primera piedra, en el coliseo rojiblanco, complementarán el resto de usos de la Ciudad del Deporte, un total de 265.000 metros cuadrados de «instalaciones deportivas de primer nivel». «Va a permitir que los 'Kokes' del futuro se puedan formar aquí, a las puertas del Cívitas Metropolitano», ha destacado el regidor.

El macroproyecto se presentó en el verano de 2022 como una muestra de colaboración público-privado y tras casi 20 años de permisos municipales y modificaciones urbanísticas. «Es la consumación de un sueño», ha asegurado el consejero delegado del Atlético, Miguel Ángel Gil. Todo comenzó con el traslado del templo rojiblanco del antiguo Calderón a las afueras, al distrito de San Blas-Canillejas. «En el 2005 empezamos a trabajar de un distrito a otro, en aquel momento era un reto, un riesgo grande. Yo desde el primer momento vi que era una oportunidad de crecer, era salir de un barrio precioso, donde ya nos habíamos hecho a la idea de que iba a ser perfecto para toda la vida, pero al ver la parcela vimos que se podía convertir un problema en un gran oportunidad», ha añadido.

Los planos ya están definidos –y enterrados en la primera parcela del complejo–: además de los polideportivos públicos, la Ciudad del Deporte dispondrá de espacios destinados al ocio y múltiples deportes, desde surf al golf, pasando por la escalada y el pádel, y un moderno centro comercial con tiendas y restaurantes. Todos las infraestructuras cumplirán con «los parámetros de sostenibilidad y sus instalaciones serán climáticamente neutras», ha informado el presidente del club, Enrique Cerezo. «Convierte esta zona en un área innovadora y singular, en un referente de la ciudad», ha concluido.

La reordenación de los accesos de la M-40 y del viario interno del entorno se completará este mismo mes de otoño, una demanda de los vecinos que sufren los colapsos cada jornada de partido. Los trabajos, que cuestan 30 millones de euros, se encuentran ahora en fase de asfaltado. «Más de un millón de personas del área de influencia se van a ver beneficiadas», ha asegurado Gil.

La primera piedra se ha colocado este martes tras 19 años de planes, y después de mover un millón de metros cúbicos de tierra. Los equipamientos municipales estarán listos a finales de 2026, y tanto el club como el consistorio confían en estrenar el resto de la ciudad antes de que termine el mandato, en 2027. Aunque quizá habrá que esperar un poco más para que el macroproyecto sea una realidad.