Madrid instalará 37 nuevas cámaras para vigilar los territorios de las bandas latinas y narcopisos

La conflictividad de la calle Cullera está asociada al auge de los narcopisos en viviendas usurpadas de protección oficial donde los clanes de la Cañada Real han trasladado buena parte de su negocio de cocaína y heroína. En cambio, en el caso del Parque Calero y Pradolongo el objetivo es poner coto a la actividad de las bandas latinas. «Esas cámaras son necesarias por su efecto disuasorio y los problemas que puedan pasar», ha explicado este miércoles Inmaculada Sanz, vicealcaldesa de la ciudad, en la inauguración del nuevo espacio creado en el cementerio de La Almudena para los bebés fallecidos antes de nacer.

En total, el Ayuntamiento instalará 37 nuevas cámaras: 18 en la calle Cullera, 14 en el Parque de Pradolongo y 5 en el Parque Calero. Estas nuevas cámaras dispondrán de inteligencia artificial, lo que permitirá anticipar las posibles conductas que atenten contra la seguridad y convivencia y perseguirlas más adecuadamente. Algunas de ellas, demás, estarán dedicadas al reconocimiento de matrículas, han detallado desde el ayuntamiento.

Noticia Relacionada

El auge de narcopisos y bandas latinas extiende la videovigilancia a otros cuatro barrios de Madrid

Carlos Hidalgo

Delegación del Gobierno apuesta por colocar vigilancia en las zonas con más pandilleros de Usera y Villaverde

El contrato compuesto por tres lotes que saldrá a concurso supondrá un desembolso total de dos millones de euros, y tendrá un plazo de ejecución de 5, 6 y 8 meses para cada uno de los tres lotes, a partir del 1 de enero de 2025. «Intentaremos agilizar al máximo los plazos, peor el desarrollo de estos proyectos exige entre seis y ocho meses, porque hay que realizar el proyecto, ejecutarlo solicitar los correspondientes permisos a la comisión de videovigilancia para que las cámaras cumplan con la legalidad y la ley de protección de datos».

Estos sistemas de videovigilancia son controlados de forma centralizada por Policía Municipal, desde espacio específico (el Centro Integrado de Señales de Vídeo -CISEVI-) donde se reciben todas las señales de vídeo y donde, mediante una plataforma de gestión, los operadores policiales pueden llevar a cabo la operativa de atención correspondiente.

Además, de forma inminente, previo visto bueno de la Comisión de Videovigilancia, comenzarán a funcionar las 16 cámaras de la Plaza del Dos de Mayo (Centro) y las 15 de Plaza Elíptica (Usera/Carabanchel), ambos compromisos electorales. El año pasado el gobierno local también incrementó la videovigilancia en la Puerta del Sol, donde instaló, aprovechando su remodelación, cuatro cámaras más que se suman a las tres ya operativas.

En el anterior mandato, el primero de Almeida como alcalde, la videovigilancia fue una de las apuestas del Consistorio en materia de seguridad e instalaron un total de 111 cámaras, un tercio de todas las de la ciudad operadas por Policía Municipal, en los barrios de Bellas Vistas (Tetuán), San Diego (Puente de Vallecas), el polígono de Marconi (Villaverde) Lavapiés y Chueca. Además, renovaron la red de la calle Montera y los sistemas de Lavapiés y la calle Ballesta.