Así será la futura estación de trenes de Chamartín: bóvedas, terrazas urbanas y bloques comerciales

El diseño ha obtenido por unanimidad la puntuación más alta entre los nueve finalistas, presentados de forma anónima por las principales firmas de ingeniería y arquitectura del mundo. 'Chamartín ecosistema abierto' apuesta por recuperar una de las señas de identidad y uno de los principales elementos diferenciadores de la estación, cuyo actual diseño data de 1975: las bóvedas. «La propuesta respeta la memoria histórica de Chamartín», explican desde Adif, que ponen en foco en que el proyecto ofrece «una estación abierta para promover el diálogo con la ciudad».

Asimismo, tendrán protagonismo los balcones urbanos o terrazas escalonadas, diseñados como una suerte de «ventanas al ciudadano sobre la estación» para integrar el complejo ferroviario en su entorno y simular una prolongación de los futuros parques que se situarán a ambos lados del nodo de transporte. Las zonas verdes se enmarcan tanto en la remodelación de Chamartín como en Madrid Nuevo Norte, gran desarrollo urbanístico de la capital.

Otro de enclaves destacados será el gran patio de manzana, un espacio que generará recorridos interiores alrededor de las vías y andenes para garantizar la conectividad y el flujo peatonal entre los accesos desde las cuatro fachadas de la estación. Para facilitar la accesibilidad y movilidad, se incluirán dos vestíbulos secundarios en el este y oeste.

La solución arquitectónica ganadora mantiene las marquesinas individuales en los andenes, pero da prioridad a la visión entre ellos y la ciudad, para que la futura estación no sea un recinto cerrado al exterior. Así, se consigue que los edificios no ferroviarios del entorno, como las tres torres de oficinas que habrá en los laterales, ganen representatividad y «sean percibidos para el viajero como la primera o última imagen de Madrid».

En este sentido, desde Adif sostienen que la propuesta responde a la funcionalidad ferroviaria, puesto que la estación tendrá dos terminales polivalentes que sostendrán los más de 31 millones de viajeros que al año transitan por Chamartín-Clara Campoamor, una cifra que tras la remodelación y ampliación de vías se estima que ascienda a los 53 millones en el año 2040. Las nuevas terminales podrán usarse de manera flexible: para salidas o llegadas de personas, el uso de distintos operadores y la evolución futura del complejo. La terminal norte incluirá un truncamiento que agilizará el acceso directo a los andenes de Cercanías.

En la zona se creará también un modelo comercial denominado 'all in hall', una solución instalada en la terminal norte que, a modo de plaza pública, albergará un área de restauración y tiendas en medio de zonas verdes, tal y como se puede observar en las recreaciones del proyecto.

El vanguardista lavado de cara de la estación de Chamartín se ha hecho esperar casi medio siglo desde su último diseño. En las próximas semanas, se completará la adjudicación del contrato de servicios para la transformación, así como la redacción de los proyectos básicos, valorado en 29 millones de euros, una vez validada la documentación del grupo empresarial seleccionado.

El concurso internacional arrancó en febrero de 2020 y atrajo el interés de 18 equipos de arquitectura e ingeniería. De ellos, diez fueron seleccionado por criterios de solvencia económica, técnica y profesional e invitados a participar un año después en la segunda fase, en la que presentaron sus propuestas de diseño. El 13 de julio de este año, nueve fueron las propuestas recibidas que, desde entonces, han sido valoradas por un jurado multidisciplinar, integrado representantes del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), Adif y Adif AV, Crea Madrid Nuevo Norte (CMNN), las administraciones local y autonómica, el Consorcio de Transportes y colegios profesionales.

El proyecto ganador, además, realiza la conexión intermodal con un intercambiador de transportes, que tendrá acceso por Agustín de Foxá, en el que se podrán encontrar taxi, Metro y movilidad activa (peatones, bicicleta, patinete). También acometerá la conexión con el aeropuerto de Bajaras, plan actualmente en licitación.

El proyecto de remodelación de la estación de Chamartín sucede a las actuaciones que Adif lleva a cabo para duplicar la capacidad de la alta velocidad y maximizar las vías y andenes destinados a Cercanías, media y larga distancia, y que representan una inversión de más de 1.000 millones de euros. Solo las de alta velocidad pasan a doce vías, desde las seis actuales, más una de estacionamiento.