Esperanza Madrid, empleada desde muchos años de la Expenduría 'El Abeto', llora sin llorar. Llora en seco. Dar el segundo premio de la Lotería de Navidad, el 48303, impone, pero ella, mirando a su jefa, confiesa que, «de este sorteo, es el primero ... que damos. La expenduría aún está tranquila. Su negociado, en Fuenlabrada, en calle Leganés 7, es ahora un temor alegre de un premio tardío. Tanto, «que no hemos tenido tiempo de ir a la copistería».
Al momento presente, la jefa, Josefa, comenta, que sólo ha llegado un cliente, que fueron más. En la avenida, desde el despacho de abogados, se quejan, «cabreadas», de que se les haya «pasado». La resignación es alegría y sonrisa. En el bar el El Mirador rayano, saben, dice Pilar, que «es un número bonito, pero nadie sabe nada».
El primer premio, que ha sido el más tardío de la historia del sorteo, ha repartido 234.800.000 euros en la Comunidad de Madrid
Selene, que tiene un despacho de abogados junto enfrente, se queja de los «ceros» y sus combinaciones malvadas. María Gema y marido ya han ido, sabiendo que ha tocado, a la administración. En Correos de Fuenlabrada, argumenta el marido de María Gema, «ha caído algo de la terminación». No dicen que les ha caído, por timidez.
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