La EMT cancela 1.827 cuentas de Bicimad de infractores reincidentes

El responsable de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante (PP), que la semana pasada activó un «plan de urgencia», respondió a las críticas de la oposición: «Este equipo de gobierno está tomando todas las medidas necesarias». El delegado repasó el decálogo: que se ha triplicado el personal de recogida de bicis, que se han desplegado 50 informadores, que se ha reprogramado la instalación de las nuevas estaciones, que se está multando a los usuarios que abandonan los vehículos en mitad de la calle. Según ha informado Carabante, la EMT (la Empresa Municipal de Transportes, de la que depende Bicimad) ha cancelado hasta la fecha 1.827 cuentas de estos infractores reincidentes.

«Ya estamos viendo los resultados: la semana pasada había un 20% de usos indebidos; el fin de semana un 16%; en el día de ayer [por este lunes], un 12%», ha asegurado el concejal. Los problemas en la red, inmersa en su expansión más ambiciosa desde que echó a rodar en 2014, se deben a la convivencia de dos sistemas durante varios meses hasta completar la migración tecnológica. El millar de bicis nuevas no pueden anclarse en las estaciones antiguas y las 3.000 bicis antiguas no pueden anclarse en las bases viejas. Los usuarios deben anclarlas 'virtualmente' junto a las estaciones y cerrar el candado a través de la aplicación. Las instrucciones de uso están disponibles aquí.

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«Cuando uno decide ampliar Bicimad tiene dos opciones: cerrar el sistema durante cuatro meses, ¿qué hubieran dicho ustedes?», ha lanzado Carabante a la bancada de la izquierda, que ha tildado el estado del servicio de «inutilizable» (la portavoz de Más Madrid, Rita Maestre), «via crucis diario» (el portavoz de Movilidad del PSOE, Ignacio Benito) y «fiasco» (el carmenista y líder de Recupera Madrid, Luis Cueto). «Optamos por la segunda», ha reconocido Carabante, «que los dos sistemas tuvieran un periodo de convivencia, y efectivamente han surgido dificultades».

Previendo estas incidencias, el ayuntamiento anunció la gratuidad del sistema desde el 7 de marzo hasta el 31 de julio, una de las razones por las que ha proliferado el vandalismo. Pero los malos usos cuestan: 5,30 euros si el usuario no estaciona correctamente la bici; 9,30 horas si su viaje supera las horas –solo es gratuita la primera media hora–; y el bloqueo de la cuenta si los incumplimientos se repiten. Mientras, los nuevos usuarios se van sumando a la aplicación, 36.100 desde el 7 de marzo, ha precisado Carabante.

La oposición ha aprovechado este pleno extraordinario para criticar la gestión del equipo de José Luis Martínez-Almeida a 54 días de las elecciones municipales. Hasta la exministra y candidata socialista a la alcaldía, Reyes Maroto, atendía desde el balcón de las visitas del hemiciclo. Al final de la sesión, los grupos han votado la proposición de Más Madrid para realizar incorporaciones a la plantilla de Bicimad, sustituir estaciones y lanzar un nuevo concurso para dimensionar el servicio. No ha salido adelante, con los votos en contra de PP, Ciudadanos y Vox. Al margen de la batalla política, Bicimad continúa su expansión. Desde el 7 de marzo, ya se han renovado 142 bases (115 nuevas y 27 antiguas) y se han incorporado 1.000 bicis azules, modernas y antivandálicas.