Todos al teatro: Madrid celebra el día de las artes escénicas

Los lugares tienen solera dramática, o bien son nuevas zonas para mover un arte, el de Lope de Vega: el Teatro Español, el Teatro Circo Price, el Centro de Cultura Contemporánea Condeduque, las Naves del Español en Matadero o el Espacio Abierto Quinta de los Molinos. Todo Madrid, sí, que se prepara para aplaudir.

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Y ya los nombres, los cómicos que decía Fernán Gómez: Pedro Casablanc, Xavier Albertí dándole en el rendido homenaje a Don Ramón María del Valle-Inclán, a Gómez de la Serna, en el recinto de la plaza de Santa Ana, a dos pasos del 'valleinclanesco' callejón del Gato, que también acoge 'La habitación blanca' y la primera gala de los Premios Talía en los que la Academia de Artes Escénicas valora el talento, la innovación, y al teatro en suma.

Más allá, el Price, en colaboración con el Centro de Documentación de las Artes Escénicas y la música, acogerá también hoy y mañana 'Las artes circenses en Espals', una reflexión multidisplinar sobre el circo, que es un escenario plural y poco valorado por lo que llaman «el público». Se trata de devolverle la dignidad a la pista y reflexionar sobre su pasado, su presente y su futuro.

No puede olvidarse en una jornada, en una semana tan especial a la danza, residente en Condeduque, que esta semana, 30 y 31 de marzo, exhibirá 'Programa/ Childs/ Carvalho/ Lasseindra/ y Doherty' bajo la laureada experiencia del Ballet Nacional de Marsella con las butacas, ya, vendidas al completo. Se trata de una tetralogía que va del minimalismo de Lucinda Childs al Belfast más barrial que inspira el movimiento y la sensibilidad de la bailarina y coreógrafa norirlandés a Oona Dohertym.

Son, definitivamente, una multiplicidad de actos que no se frenan por la señalada fecha, sino que permanecerán un tiempo. Un tiempo, por ejemplo, para ver, hasta el 7 de mayo, a 'Uz: el pueblo', donde Pepe Viyuela da definitivamente el do de pecho (Naves del Español) en una comedia que trasciende el humor y va más al alma que a la carcajada. O en el teatro Fernán Gómez-Centro Cultural de la Villa, la representación de 'Sobre el caparazón de las tortugas' de Ignasi Vidal, que de la canción a la dramaturgia, de ahí a la literatura o al cine, ha hecho de todo en este mundillo, tan necesario como inestable. Ahí están, por ejemplo, sus inolvidables interpretaciones del inspector Javert en el musical 'Los Miserables' o su papel de la Bestia en 'La Bella y la Bestia'.

Madrid se viste de teatro porque está en su propio ADN. La excusa es el Día Mundial del Teatro, y así, según fuentes municipales, ponderan que se «festeja» la efeméride. Pese a ser lunes. El abanico de los escenarios se ha abierto con más fuerza si cabe, y en la variedad está el gusto. Y el madrileño va de la danza a la tragedia, de la tragedia a la comedia, con la vocación y la convicción forma parte y de ser residente de una de las capitales mundiales de un arte que, recordaba el productor Jesús Cimarro, lleva dos milenios en 'crisis'»