Se buscan castillos, atalayas, ermitas o pilones para rescatarlos en la Comunidad de Madrid

El objetivo lo han fijado en los pequeños municipios, los que tienen menos de 20.000 habitantes, que son 144 en la Comunidad de Madrid. A sus responsables municipales les van a pedir que busquen e indiquen a la autoridad regional qué edificios o elementos de valor histórico y artístico tienen ahora abandonados o en desuso, y en qué orden de prioridades querrían que se recuperaran. La propia consejería, por su parte, también va a elaborar su propio listado; de hecho, ya ha avanzado bastante en ello.

Se buscan todo tipo de elementos: castillos, atalayas, torres, ermitas, fuentes, lavaderos, pajares, pilones, cruces, antiguos bebederos, molinos, arcos... edificios singulares que formen parte del patrimonio para rehabilitarlos y volver a ponerlos en valor, de manera que no se pierdan.

A la hora de hacer la selección de los inmuebles que pasan por 'chapa y pintura', se tendrán en cuenta las valoraciones y criterios del área de Cultura, donde están los expertos en patrimonio cultural. El objetivo del plan es doble: por un lado, conservar la identidad e historia de cada municipio; y por otro, que esta recuperación sea un revulsivo turístico y, por consiguiente, económico para esas localidades.

Lo primero que se va a hacer es un catálogo de edificios, terrenos o construcciones, preferiblemente de titularidad municipal o que puedan ser cedidos a los ayuntamientos de forma sencilla. Más tarde, se clasificarán éstos según tipologías y en función de la necesidad de mejoras que tengan. Por último, se acometerá la reconstrucción o rehabilitación.

De este mismo programa de inversiones regionales (PIR) saldrán los fondos para el plan que anunció días atrás la presidenta Díaz Ayuso –dentro de la estrategia de turismo regional– para embellecer los cascos antiguos de los municipios madrileños. Son acciones éstas que se llevarán a cabo en paralelo con las otras de recuperación de elementos singulares en pequeñas localidades.

En esta misma línea de mejorar los servicios en localidades pequeñas, la Consejería de Presidencia, Justicia y Administración Local también va a aumentar las oficinas móviles de atención al ciudadano que se desplazan hasta los municipios. Estas son actualmente dos, y van a pasar a ser el doble, cuatro, más uno de reserva.

El proyecto piloto que las puso en marcha comenzó el 27 de marzo y hasta el 4 de octubre ha atendido a 4.000 ciudadanos. Pero más allá del número, el consejero Miguel Ángel García destaca la importancia de dar servicio a personas que, de otro modo, tendrían que haberse desplazado decenas de kilómetros para realizar gestiones como pedir la tarjeta sanitaria o tramitar la escolarización de sus hijos.

Estas son algunas de las gestiones que se pueden realizar desde estas oficinas móviles de atención al ciudadano, que también sirven para registrar documentación o solicitar información y orientación sobre cualquier programa o servicio que presta la Comunidad de Madrid. De hecho, un 30 por ciento de las solicitudes de información se refieren a Asuntos Sociales: dependencia, familia o maternidad. Con el refuerzo de este servicio, se acortará la frecuencia con que las oficinas móviles acuden a cada pueblo.