Almeida convertirá el mercado de Legazpi en un complejo de oficinas municipales antes de 2027
El alcalde de Madrid avanza en su promesa electoral para ahorrarse 16 millones de euros en alquiler
Almeida quiere rescatar el mercado fantasma de Legazpi para uso vecinal
Madrid
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónUn mes antes de las urnas, José Luis Martínez-Almeida prometió rescatar un mercado fantasma al sur de la capital. Este lunes, el Ayuntamiento de Madrid ha difundido las primeras recreaciones de lo que será el antiguo bazar de frutas y verduras de Legazpi ... antes de 2027. El Gobierno del PP imagina un complejo de oficinas de 23.000 metros cuadrados para 2.500 funcionarios municipales; un traslado que ahorrará 16 millones de euros en alquileres de otros edificios a las arcas madrileñas. También se levantarán tres equipamientos dotacionales de uso vecinal, como anunció Almeida en campaña electoral, cuyos detalles aún están por definir. Costará 64 millones de euros.
El predecesor del enorme Mercamadrid se inauguró en 1935 y, durante gran parte del siglo XX, el mercado de Legazpi fue la mayor lonja de frutas y verduras de la ciudad. Hasta su clausura, en 1983, cuando el bazar traspasó toda la actividad comercial a su hermano mayor y, después de varios intentos infructuosos por dedicarlo a otros usos, el edificio de titularidad municipal cerró. Y el tiempo hizo el resto.
La primera propuesta para recuperar el inmueble abandonado, en el distrito de Arganzuela, la firmó Alberto Ruiz-Gallardón en 2008. El exalcalde del PP quería que fuera la sede de la concejalía de Urbanismo y convocó un concurso de ideas, que ganó el estudio de arquitectos Ulargui Pesquera. En ese proyecto ya se advirtió de los problemas bajo los cimientos, «fenómenos de colapso o erosión interna en el terreno por su carácter arenoso suelto sin saturar», según uno de los informes de la entidad de control Intemac. El mercado necesitaba una reforma, pero se acometió una década después.
La capital crece en vertical a orillas de Madrid Río
Aitor Santos MoyaLa falta de suelo residencial provoca un cambio radical en el paisaje de una de las zonas más revalorizadas
El Gobierno de Ahora Madrid se puso manos a la obra en 2018. Manuela Carmena pretendía convertir el mercado en unas oficinas para 2.000 trabajadores municipales y otros equipamientos, una parte de ellos que cedería a colectivos okupas y asociaciones vecinales, como publicó ABC. Sin embargo, cuando la empresa adjudicataria de los trabajos, Acciona, aterrizó en la parcela, descubrió que existía riesgo de colapso por esa rehabilitación que nunca se había ejecutado. Carmena paralizó las obras y pasó el relevo a Almeida.
Desde 2019, el Área de Obras y Equipamientos ha gastado más de 16 millones de euros en subsanar las patologías del mercado de Legazpi. Se han recalzado 517 zapatas, instalado 1.774 nuevos micropilotes, reforzado 96 pilares y reparado 14.500 metros cuadrados de losa, según el balance de la concejalía que dirige Paloma García Romero. Y en 2024 se invertirán casi 10 millones de euros para finalizar dichos trabajos de consolidación antes de comenzar la verdadera reforma. «Van a permitir la recuperación estructural del edificio para posteriormente poder acometer las obras que le permitan dar una utilidad y recuperar un edificio emblemático en un lugar privilegiado», ha destacado Almeida durante su visita al mercado.
Oficinas, uso vecinal y aparcamiento
Según el boceto anunciado este lunes por el alcalde, la superficie de 30.000 metros cuadrados se transformará en un complejo de oficinas, tres equipamientos dotacionales y un aparcamiento subterráneo de 300 plazas. El esqueleto de hormigón del mercado se mantendrá porque es un elemento protegido, mientras que el resto de acabados respetarán los dictámenes de la Comisión de Patrimonio y la estética del propio mercado. La concejal del distrito, Lola Navarro, decidirá el uso definitivo de los equipamientos. Almeida solo ha avanzado que habrá un «auditorio» y que se reorganizará el personal administrativo del edificio Apot, de la calle de Bustamante y de la Agencia Tributaria de Madrid. Calcula que la mudanza será en 2026, cuando ya tendrán listo un plan de movilidad para la zona.
Después de cuarenta años en el olvido, el ayuntamiento pretende «dar respuesta a demandas históricas del entorno» con esos edificios de uso vecinal que servirán tanto a Arganzuela como al distrito limítrofe de Usera. Aunque tendrá un coste millonario (64 millones de euros), el consistorio pretende amortizar esa cantidad «en unos cinco años, gracias al ahorro en alquileres» de oficinas.
La remodelación del mercado de Legazpi completará además la actuación en el sureste de Madrid Río y rematará el eje norte-sur de la capital con la culminación de Castellana, Prado y Delicias, sostienen desde el Área de Obras y Equipamientos. «El proyecto permitirá reactivar todo el entorno, introducir mayores niveles de seguridad, promover el comercio local, incrementar los servicios a los ciudadanos y, en definitiva, consolidar un polo de centralidad para el nuevo barrio de los Metales», añaden.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete