Del alcalde de Fuenlabrada al ministro López: Sánchez sube la apuesta contra Lobato
El delegado del Gobierno, con el visto bueno de Ferraz, ha eclipsado la labor de oposición del líder de los socialistas madrileños en el último año
El PSOE busca desacreditar y dar carpetazo a la Comisión Begoña y el PP se guarda una carta
El portavoz de los socialistas madrileños, Juan Lobato
Primero fue el alcalde de Fuenlabrada, Javier Ayala. Luego llegó el turno del delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, señalado dentro y fuera de su partido como posible relevo en la región. Y ahora aparece un nombre nuevo, supuestamente promovido desde Ferraz y ... La Moncloa, para competir con Juan Lobato en las primarias del PSOE madrileño y hacerse con el liderazgo del partido en la región. Se trata de Óscar López, ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública desde el pasado mes de septiembre y cuya carrera política ha estado ligada en buena parte a Castilla y León. El nombre de Óscar López ya está en boca de todos los socialistas madrileños, aunque Lobato confiesa que a él nadie le ha dicho nada desde Ferraz ni desde La Moncloa. «Yo no sé quién es Ferraz ni quién es Moncloa. Yo sé con quién hablo y lo que me transmiten no va por ahí», comentó. Y el portavoz del PP, Carlos Díaz-Pache, le sacó de sus dudas a su manera: «Yo se lo digo, Ferraz y Moncloa son Pedro Sánchez».
«Es el día de la marmota», repetía este lunes un resignado Lobato, primero en una entrevista en Onda Cero y luego tras la Junta de Portavoces de la Asamblea. Sorpresa, ninguna. «Llevamos 20 o 30 años con lo mismo. Esto ya no sorprende. No hemos escuchado nada, ni desmentido ni confirmación de ninguno de los nombres que están saliendo».
Hace menos de una semana, el actual líder de los socialistas madrileños recibía con todos los honores a la esposa de Sánchez, Begoña Gómez, en la Asamblea de Madrid, ante su comparecencia en la comisión de investigación. Solo unos días después se desayunó con la filtración del nombre de López como apuesta de Sánchez para quitarle el puesto. En el PP, sin compasión, lo ven toda una «humillación». El alcalde Almeida le envió un mensaje de «cariño y aliento»: «No es fácil hacer el ridículo que hizo el otro día con Begoña Gómez, diciendo lo solvente que había estado cuando no dijo ni una palabra».
A Lobato se le nota un hastío evidente. Después de una semana clave para Madrid, en la que él incluye el «fracaso» del PP en la comisión de investigación, desde su partido desvían el foco a la pelea interna por el liderazgo en Madrid. El portavoz de los socialistas madrileños en la Asamblea está harto de lo que llamó «ocurrencias» en su partido. Una habitual, según señaló, es la de presentar a «un mirlo blanco» a seis meses de las elecciones como gran esperanza, algo que luego siempre acaba en fracaso. «Allá cada uno».
Frente a esa manera de actuar un tanto impulsiva de su formación política, defendió el «proyecto serio» que, a su juicio, representa él con su equipo, y que cuenta, según cree, con el apoyo de la inmensa mayoría de la militancia.
Como ya hizo cuando salieron a la luz otros nombres como posibles competidores en las primarias, recordó que «cualquiera que tenga la ilusión, las ganas y que conozca la realidad madrileña, que se haya pateado los barrios, los distritos y los pueblos tiene el derecho a poder presentarse». La fecha clave es el 7 de diciembre, día en que deben presentarse las distintas candidaturas para las primarias. El 'recado' a su nuevo contrincante estaba implícito, ya que no parece que López se haya pateado los barrios de Madrid ni todos los pueblos de esta región.
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ContinuarEl 11 de enero será la votación en primera vuelta y el 18 de enero, en segunda. El congreso regional del PSOE en Madrid será el 1 y 2 de febrero. Lobato remarcó que «por supuesto» que él se va a presentar, porque su proyecto «a medio plazo» es «lo serio y lo lógico». Además, reivindicó que es él y su equipo quienes representan la unidad dentro de su partido, por lo que animó al resto a unirse a ellos para formar una alternativa más fuerte frente a Ayuso.