Así será por dentro el futuro hotel del Edificio España

Como informó ABC, la cadena se hizo con el control del edificio inesperadamente, después de que meses atrás anunciara que renunciaba a aportar el 25 por ciento de la inversión y se quedaba únicamente como inquilino. Baraka se lo revendió después de formalizar su acuerdo con Wanda , por 272 millones de euros, y poner fin a un culebrón que se prolongó durante los últimos tres años. Aunque ni Riu ni el grupo empresarial murciano dieron entonces detalles del coste exacto de la operación, fuentes de la hotelera explicaron a ABC que el montante total oscila entre los 380 y los 400 millones de euros, contando tanto la adquisición del inmueble como su reforma.

La consejera delegada de Riu, Carmen Riu , avanzó el pasado miércoles algunos trazos sobre cómo será el futuro hotel. Pese a la predicción de que se levantará como un espacio de lujo, lo cierto es que busca atraer todo tipo de público. «La idea de que solo queremos clientes de cinco estrellas es mentira», dijo Riu en las jornadas «Retos del sector turístico», según recoge EP. Sobre cómo se gestó la compra, la máxima responsable de la entidad explicó que llevaban tiempo buscando una ubicación para su primer centro urbano y también admitió la complejidad del proyecto: «No sé si ha sido un acto de confianza o de locura».

El Riu Plaza será un hotel de cuatro estrellas superior, con varios elementos característicos. Una de las grandes apuestas será el espacio que se habilitará en la azotea, en el piso 26. En este punto, desde el que se admira prácticamente toda la capital, se ubicará una piscina desbordante junto a una pasarela de vidrio transparente que dará la sensación de estar flotando en el cielo de Madrid. Alrededor habrá tumbonas y una barra.

Debajo, se instalará un Sky bar panorámico con zona de restauración. La intención es que la azotea y esta zona sean dos de los principales atractivos y se complementen para que su servicio no se interrumpa en ninguna época del año. Aunque el diseño aún no es definitivo y puede variar, tendrá unos grandes ventanales que ocuparán casi toda la fachada de la planta. Ambos espacios, que como el resto deberán respetar escrupulosamente la fachada, serán la corona de las más de 600 habitaciones con las que contará.

El hotel ocupará 24 de las 27 plantas que tiene el Edificio España. Las otras tres, que serán las dos primeras y la entreplanta, albergarán la zona comercial. Una superficie de 15.000 metros cuadrados que, presumiblemente, atraerá a los principales operadores de moda del mundo. Aunque en principio se habló de que el mejor posicionado era Galerías Lafayette , ahora no está tan claro porque esta negociación se hizo con Baraka, cuando aún se esperaba que fuera a ser el único propietario. No obstante, el grupo que preside Trinitario Casanova será quien gestione el área y lo más probable, aunque ninguna de las partes lo ha confirmado, es que las conversaciones sigan el curso marcado meses atrás.

Bajo este espacio se situará la recepción del hotel y una zona de restauración. El primer boceto refleja un acceso de corte clásico . Muy luminoso, con cristaleras desde el suelo hasta el techo, el mármol será el material principal, sobre todo en color blanco y en diferentes tonalidades de verde. A pesar de que ya hay recreaciones gráficas, este puede variar a lo largo de la obra.

En orden ascendente, sobre la recepción y la zona comercial, se ubicará la dedicada a la restauración y la celebración de eventos. Con una sala de 1.800 metros cuadrados, toda esta superficie ocupará los pisos 3, 4 y 5 del edificio. Como el resto, estos espacios ya se plantearon hace meses, mucho antes de que Riu fuera a operar únicamente como inquilino. Así, aunque ahora es el único propietario, el trabajo en ese sentido está avanzado.

El resto del rascacielos, dividido en tres alturas fundamentales, acogerá las 650 habitaciones. Fuentes de Riu explicaron a ABC que la apariencia de estas aún no está definida, si bien sí se tiene más o menos claro dónde se situarán. Con varios tipos de estancias, las más exclusivas estarán en la primera altura, la que se ubicará en las dos torres que flanquean el tronco del rascacielos a ambos lados. En la parte más alta de estas, en las plantas 10 y 11, se instalarán las suites. Según la orientación, los huéspedes podrán contemplar la Gran Vía, la plaza de España -que será reformada- o el perfil escarpado de la Sierra de Guadarrama.

En el siguiente cambio de altura, en el piso 20, se proyecta un gimnasio y una terraza Chill Out , con una concepción similar a la de la azotea pero sin piscina. Como en el caso del área comercial, la pretensión es que los restaurantes y bares que saltearán el edificio ofrezcan un servicio exclusivo, con una oferta gastronómica diversa.

Desde Riu explican que el proyecto está actualmente en una fase de diseño y de elaboración de planos. En conversaciones constantes con el Ayuntamiento para la tramitación de la licencia del hotel, la previsión más optimista aventura que la transformación comenzará a final de año.

Antes, la concejalía de Urbanismo tendrá que entregar el permiso. Si nada se tuerce podría estar listo después del verano, como tarde en octubre. No obstante, las obras pueden comenzar inmediatamente porque esa licencia ya está en orden.