Richard Gere sopesa instalar un gran centro del Budismo en Alcorcón

La mañana del pasado 14 de febrero, hace ahora justo un mes, vecinos alcorconeros se sorprendían al ver en su municipio a la estrella de Hollywood. Acompañado de su novia, la española Alejandra Silva , se acercaba a las instalaciones del Creaa. Recorrió su interior, sin perder el más mínimo detalle de las posibilidades del complejo como gran centro cultural e histórico del Budismo de referencia europea. La visita fue muy discreta, sin cámaras que captaran la imagen del cineasta.

Gere representa a un fondo inversor que lleva varios meses, desde al año pasado, en conversaciones para sacar adelante esta atractiva idea. Los interesados cuentan ya con la financiación necesaria y su punta de lanza es el actor, que cuenta con línea directa con el Dalai Lama , de cuyas enseñanzas es una especie de «embajador» mundial, aprovechando el enorme tirón de su imagen pública. Richard Gere y los inversores quedaron bastante satisfechos con el centro y se espera que repitan la visita a Alcorcón el próximo mes de mayo. Aunque, eso sí, no hay nada cerrado y todo se encuentra en estudio.

Si todo cuajara, sería una magnífica salida para el Creaa, un proyecto heredado por el actual Ayuntamiento y que representa el derroche del anterior alcalde, Enrique Cascallana (PSOE) . En los últimos años, se han interesado por el centro otras grandes propuestas: desde el Circo del Sol a la mismísima NBA, que pretendía convertirlo en una sede de representación en Europa, con tienda y escuela; así como otros grupos empresariales y pictóricos.

El Creaa fue proyectado en 2007 durante el mandado socialista, una idea del propio Cascallana que, en principio, buscaba instalar un gran circo;su padre había trabajado como payaso. Pronto, el centro que pretendía ser el enclave cultural de referencia del sur de Madrid comenzó a hacer aguas. Cuenta con 65.000 metros cuadrados , nueve edificios interconectados y mastodónticos (todos empezados y algunos a medio terminar), que salieron por la friolera de 110 millones de euros. Pese al fiasco, los socialistas incluso pretendieron hacer una segunda fase, con otros 55.000 metros de superficie y un auditorio para 1.500 personas. Hoy, sigue vacío.