Chocolate culé con «peta zetas» para celebrar la Champions merengue

Lo que no sabían es que la cabeza que había ideado aquellos medallones de chocolate era la de un aficionado del eterno rival, el Fútbol Club Barcelona. « Oriol (Balaguer) —creador del dulce y propietario de la pastelería— es del Barsa, sí», afirma entre risas Fátima Orué, dependienta de La Duquesita , la pastelería madrileña que recibió el encargo del Ayuntamiento de preparar un obsequio conmemorativo para los jugadores merengues una semana antes de que se proclamaran campeones de Liga en Málaga.

Y les gustó tanto el regalo a los jugadores —algunos de ellos, como Cristiano Ronaldo o Morata incluso se lo comieron en el momento—, que Carmena dijo que había que repetir si los chicos de Zidane conseguían el doblete con la Champions. Los jugadores blancos cumplieron, Carmena tuvo que volver a La Duquesita a por más medallones y allí recibieron el encargo encantados. «Es un honor» , resume Orué, quien revela que estas medallas llevan, en su interior, un ingrediente secreto: «Peta zetas».

El regalo, sin embargo, no sólo encandiló a la plantilla del Real Madrid, sino que incluso ha habido aficionados que han llamado a esta bombonería para intentar comprar alguna medalla. «Sí, sí, la quieren muchos madridistas.«Hemos recibido llamadas de todas partes de España de gente preguntando, pero no podemos venderlas ya que son una edición exclusiva para los jugadores y directivos», responde la dependienta.

En total sólo han hecho 80 medallas : 40 por cada título y tampoco han desvelado el gran secreto. «Yo también soy del Barcelona», reconoce Orué, quien también «delata» a algunos de sus compañeros del obrador: «Hay también hay algún otro barcelonista». Eso sí, ante todo, Orué insiste en que, cuando se trata de trabajo, los colores pasan a un segundo plano. «Somos muy profesionales», asegura aunque también admite que estarían encantados de hacer otras medallas para el Barcelona o el Atlético si ganan, claro, algún título.

Ya se sabe que, antes del chocolate, hay que hacer los deberes. Aunque seas futbolista.