Los proxenetas de las niñas tenían múltiples órdenes de busca y antecendentes, pero campaban libres

Todos se negaron a declarar ante el juez y la Policía ; y también, en su mayoría, a dar voluntariamente muestras para extraer su ADN, según consta en los atestados del caso, a los que ha tenido acceso ABC. El supuesto cabecilla y otros más, por otra parte, están ilocalizables y penden sobre ellos órdenes de busca y captura por estos hechos de trata de menores, agresiones sexuales y tráfico de drogas, entre otros.

Abdelaziz R. es uno de los encartados y de los supuestos ‘clientes’ de la trama. Marroquí de 51 años, tiene una reclamación por un delito de lesiones desde noviembre de 2020. Presenta otras, ya caducadas, por robos con fuerza, con violencia, lesiones, violencia doméstica... Ronaldo Antonio M. C. es el famoso ‘Kalifa’ , uno de los principales captadores y ‘novio’ de dos de las menores. Dominicano de 25 años, otro juzgado le buscaba por lesiones y tuvo otras requisitorias por tráfico.

Ana B. R., nacida en Barcelona hace 48 años, es una ladrona que estuvo buscada por atracos y violencia doméstica, así como por lesiones. Apodada la ‘Gitana’ por las menores, es una de las mujeres que presuntamente actuó de cancerbera para la banda en los pisos-zulos donde las dejaban encerradas durante días. Melvin M. es ‘Metralla’: dominicano, 32 años, con detenciones por daños, desobediencia, delitos contra la seguridad vial, falsedad documental... Con casa en Vallecas, es quien grababa más vídeos haciendo ostentación de prendas y enseres de lujo.

Su paisano Esmelin S. G., de 30 años, es un presunto traficante de drogas, de amplio historial y supuestamente involucrado en la trata, violaciones y venta de estupefacientes con las menores. Graviel Elmira S. B. (30 años) y Aneudis Ascanio A. D (27) son dos presuntos miembros de los Dominican Don’t Play, con reyertas y venta de drogas a sus espaldas; tienen un perfil muy parecido a Brahian F. P. (23).

Carolina M. G. es la getafense de 18 años a la que llaman ‘la Rubia’. Su papel en la banda era muy importante: no solo captaba, sino que también ‘custodiaba’ a las menores violadas en sus escondrijos. Además, los jefes confiaban a ella las órdenes de traslado de la droga a las niñas , que se veían obligadas a hacer de ‘mulas’ llevando el estupefaciente en sus vaginas. Ella misma se fugó de centros de menores cuando tenía 14 años. Era la que mejor podía conocer el funcionamiento de la red en estos aspectos. Dany Osmilin V. T. es un peligrosísimo dominicano de 28 años, al que un juzgado ya buscaba por homicidio doloso desde 2015. Miembro activo de la mencionada banda latina, le constan reseñas previas precisamente por pertenencia a organizaciones criminales y tráfico de drogas.

José Luis M. C. (26 años) es otro sujeto pandillero, que además escapó de un centro de guarda/tutela en 2013. Su historial delictivo es apabullante, con reclamaciones ya cesadas por: homicidio doloso, riñas tumultuarias, asociación ilícita, amenazas, lesiones, robos con violencia, falsedad documental, receptación, robo con fuerza, delito contra la salud pública, malos tratos...

La tercera mujer es María Jesús V. H., madrileña de 56 años. Regenta uno de los prostíbulos donde presuntamente se vejaba a estas crías. El caso de Roberto C. R., de 30 años, dominicano nacionalizado español, es de los más llamativos. ‘Atesora’ el mayor número de detenciones previas, hasta un total de 40: drogas, apropiación indebida, lesiones, amenazas, malos tratos, allanamiento de morada, agresión sexual, quebrantamientos de condena... La marroquí Zhora E. E. (38 años) es la presunta regente del prostíbulo La Casita. Fue pareja del padre de una de las víctimas.