Hazte premium Hazte premium

Primarias del PSOE a la Alcaldía

Pepu Hernández, el hombre de Pedro Sánchez, se impone en las primarias con una holgada victoria

El ex seleccionador nacional de baloncesto logra más del 64% de los apoyos de la militancia y vence a Manuel de la Rocha y a Chema Dávila en la primera vuelta

Chema Dávila, Manuel de la Rocha y José Manuel Franco aplauden, ayer en la sede del PSOE-M, al recién nombrado candidato socialista a la alcaldía de Madrid, Pepu Hernández MAYA BALANYÀ
Marta R. Domingo

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Pepu Hernández (Madrid, 1958), el hombre de Pedro Sánchez , será el candidato del PSOE-M a la alcaldía de Madrid tras vencer con un amplio margen en las primarias de su partido. El del ex seleccionador nacional de baloncesto era el cuarto nombre que quedaba por confirmarse para los comicios del 26-M, fecha en la que tendrá que medirse con Manuela Carmena (Más Madrid), José Luis Martínez-Almeida (PP) y Begoña Villacís (Ciudadanos). El entrenador madrileño venció en la primera vuelta de las primarias a Manuel de la Rocha y a Chema Dávila con el 64% de los votos emitidos, mientras que el ex alcalde de Fuenlabrada logró un 22% (590 votos) y el concejal se tuvo que conformar con un 13% (353 apoyos). En total, se emitieron 2.692 votos, el 50,51% del censo. Hubo 4 papeletas nulas y 28 en blanco.

El aspirante «ungido» por Sánchez evitó valorar el por qué de la abultada diferencia con respecto a sus dos rivales en estos comicios internos y apeló al «juego en equipo» para desarrollar el «potencial» de su candidatura. «Los militantes de Madrid ejercen su competencia, cada uno lo puede hacer por una razón distinta», sostuvo Pepu, que confesó que tras conocer su victoria se intercambió mensajes de Whatsapp con el presidente del Gobierno .

«Vamos a ser muy exigentes con nosotros mismos porque van a serlo con nosotros tanto los militantes como los ciudadanos de Madrid», afirmó, sin dar más detalles, tras ser preguntado sobre si tiene claro con quién contaría en su lista electoral. «Esa será la siguiente fase», zanjó poco antes de recibir un sonoro aplauso de la sala, en la que estaban presentes los tres concejales en los que se ha apoyado durante la campaña: Mar Espinar, Mercedes González y Ramón Silva.

Pese a que Pepu fue el claro ganador, la primera ovación que se escuchó en Buen Suceso, 27 surgió a la llegada de De la Rocha a la sede del PSOE-M. Fue un gesto de reconocimiento a los meses de precampaña, ya que este abogado laboralista llevaba desde octubre postulándose, mucho antes de conocerse el nombre de Pepu.

La semana pasada entregó 450 avales y confiaba, como expresó en una reciente entrevista con ABC , en que el voto secreto le iba a permitir, al menos, pasar a la segunda ronda. Sin embargo, la dilatada carrera de De la Rocha en las filas socialistas –fue alcalde de Fuenlabrada, consejero de Educación y diputado en el Congreso hasta 2015– no fue suficiente para vencer a la presión de la cúpula socialista. «Mientras otros partidos apoyan el dedazo, nosotros votamos de forma libre. Pepu va a tener todo nuestro apoyo», subrayó haciendo hincapié en la lealtad entre los socialistas.

Entre halagos al ganador, De la Rocha también quiso echar un capote a su otro rival. «Creo que Chema (Dávila) debería seguir siendo un gran concejal socialista », dejó caer el exregidor con la intención de que Pepu cuente con él en su lista. El resultado del edil, sin embargo, fue bastante menor al esperado, puesto que logró incluso 13 votos menos que los avales que llegó a presentar. Pese a los datos, Dávila aseguró que para él estos «han sido días maravillosos». «Estoy muy orgulloso de militar en este partido. Es el momento de unir fuerzas; estamos inequívocamente con Pepu y vamos a trabajar para que sea el próximo alcalde de Madrid», reiteró.

Presión de Ferraz

Aunque Pepu no pudo votar en las primarias, porque no es militante, el técnico madrileño logró obtener 1.697 apoyos, gracias a la presión de Ferraz. La movilización de los tentáculos del aparato permitió que el elegido por Sánchez acumulase antes de que se cumpliese el plazo de entrega de avales más de un millar de apoyos, cuando el máximo permitido eran 531 firmas (10% del censo). El actual presidente del Gobierno prometió otorgar todo el poder a la militancia en el 39º Congreso del PSOE, pero los hechos han demostrado lo contrario.

Primero, por el inédito acto de presentación de Pepu, que se llevó a cabo el 4 de febrero en el Teatro de La Latina , donde fue presentado por el propio Sánchez y arropado por varios ministros. Salvo Franco, el resto no aparecieron por los actos de De la Rocha ni de Dávila. Y, después, la prueba más clara de que Ferraz ha tratado de cerrar filas en torno a su candidato predilecto se evidenció el pasado jueves, cuando se celebró el esperado debate entre los tres aspirantes. La cita fue a puerta cerrada, el modelo que forzó Sánchez para proteger a su favorito . El ahora candidato a la Alcaldía no se salió del guión que traía escrito . Una hoja de ruta trazada por la dirección cuya máxima aspiración será ahora la de «recuperar la Alcaldía» para los socialistas después de 30 años.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación