La pandemia reduce a la mitad los matrimonios y hacer caer un 20% los divorcios en Madrid
En los últimos diez años, la tendencia general ha sido de caída ligera pero continua del número de enlaces
Una boda durante la pandemia en Alcalá de Henares
Casarse en plena pandemia fue todo un ejercicio de constancia, paciencia y tesón. Divorciarse algo menos, por aquello de que no suele conllevar una celebración multitudinaria. En ambos casos, la expansión del coronavirus dejó huellas imborrables tanto en los nuevos enlaces como en las separaciones, ... de los que ha quedado constancia en los datos oficiales del Registro Civil : las bodas se redujeron casi a la mitad, mientras que las crisis y divorcios cayeron un 20 por ciento.
La circunstancia afectó a todo el país: de hecho, en el conjunto de España la caída de los matrimonios en 2020 fue del 45,17 por ciento, lo que dejó la tasa de nupcialidad de la nación en 1,91 enlaces por cada 1.000 habitantes, el más bajo desde 1976 y uno de los menores del mundo.
Pero es que en Madrid las cifras son incluso peores: el año que la pandemia nos arrasó, se celebraron 12.394 matrimonios, un 47,34 por ciento menos que el año anterior. Muchas parejas, como la de Laura y Asier, tuvieron que posponer sus enlaces :«Me llamaron unos meses antes de la fecha prevista desde el ayuntamiento del pequeño municipio donde habíamos concertado la boda, para avisarnos de que las restricciones impedían que nos reuniéramos». Hubo que retrasarlo varios meses y, como efecto en cadena, también el convite . Durante este tiempo, ha habido enlaces retransmitidos por ‘streaming ’, y se han visto mascarillas a juego con los trajes de novia y de madrina.
En lo que llevamos de año, hasta el mes de noviembre, se han producido ya 18.133 bodas en Madrid, un 46,30 por ciento más que el fatídico 2020. Aún así, la tendencia general en los últimos 10 años es de una ligera pero continua caída de los enlaces: si en 2007 se celebraron 28.504 matrimonios, en 2019 habían bajado a 23.538.
El ‘pico’ de la serie histórica se alcanzó en 1975, año en el que se llegaron a celebrar en la Comunidad madrileña la friolera de 34.223 matrimonios.
Reubicar agendas
El estado de alarma trajo la suspensión de citas en el Registro Civil para la tramitación de expedientes de matrimonio: se dio prioridad a las inscripciones de nacimientos y fallecimientos. Una vez superado el confinamiento, la actividad se retomó y «se ha hecho un esfuerzo ingente en los registros civiles para tramitar todos los expedientes de matrimonio que permanecieron paralizados durante ese periodo», explican fuentes de la Consejería de Presidencia, que dirige Enrique López. También hubo que reubicar en agenda todas las bodas que no se celebraron durante las fases más duras de la pandemia, y aquellas de quienes decidieron postponerlas a fechas en las que se pudieran celebrar en condiciones de una mayor normalidad.
Del análisis de los datos del Registro se obtiene otra conclusión: hay tendencia a un aumento de la edad de los contrayentes . Es algo que ocurre en todo el territorio nacional: la edad media en 2020 superó en lo hombres los 40 años por primera vez, situándose en los 40,4 años. En las mujeres, se situó en 37,4 años.
Cuando acaba el amor
Igual que se toma concienzuda noticia de los enlaces que se producen, también se registran los divorcios, separaciones y anulaciones. En este caso, los datos los proporciona el Instituto Nacional de Estadística, y reflejan que también se produjo un descenso de estos durante el primer año de la pandemia . En concreto, los llamados procesos matrimoniales fueron un 19,85 por ciento menos en 2020: 10.420 respecto a los 13.001 que se tienen registrados en el año anterior a la pandemia.
La inmensa mayoría de estos 10.420 procesos son divorcios: un 96,55 por ciento del total. Las separaciones suponen un 3,38 por ciento, y las nulidades apenas un 0,07 por ciento.
Los divorcios sólo requieren, desde la modificación legal de 2005 de la Ley de Enjuiciamiento Civil y el Código Civil , de un plazo de tres meses desde el matrimonio para realizarse, simplemente con la demanda de cualquiera de los esposos: no hace falta alegar causa, como sí había que hacer previamente a este cambio legal. Desde esa fecha, los divorcios crecieron en Madrid un 77,32 por ciento.
La viceconsejera de Justicia Yolanda Ibarrola detecta ya, en los últimos datos del Registro, una progresiva «vuelta a la normalidad» en uniones y desuniones.
Noticias relacionadas