El Palacio de Congresos de la Castellana será la sede de la Organización Mundial del Turismo

El Palacio, inaugurado en el año 1970, ha sido una de las principales infraestructuras dedicadas a este tipo de eventos. Pero, por diversas razones, su uso fue decayendo, a lo que contribuyó vivamente el incendio que destruyó buena parte de sus instalaciones en el año 1995. Inexplicablemente, la instalación nunca se reparó tras ese fuego;una importante zona quedó inutilizada y así continuó durante más de una década, hasta que el inmueble fue cerrado a finales de 2012.

La causa oficial del cierre fueron los problemas de seguridad que soportaba, en un momento en que la desgracia del Madrid Arena sensibilizó especialmente a los responsables políticos sobre las condiciones de los recintos donde se albergan actos multitudinarios, como era el caso. La necesaria renovación y puesta al día suponía una inversión que en aquel momento, en plena crisis económica, se consideró inviable. Es propiedad estatal y está adscrito actualmente al Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital , que dirige Álvaro Nadal .

Los responsables de este departamento han decidido reabrirlo, pero con un uso diferente al que tuvo como centro de congresos:quieren que sea la nueva sede de la OMT. De hecho, ya se ha iniciado la tramitación del expediente para la elaboración del anteproyecto que permitirá esta transformación.

Fue el director general de Turespaña, Manuel Butler, quien adelantó a mediados de septiembre la intención del Gobierno español, propietario de esta infraestructura, de trasladar la sede del organismo de la ONU al Palacio de Congresos. Lo dijo ante el comité ejecutivo de la OMT, reunido por la celebración de su 22ª Asamblea General.

La idea se ha concretado ya, hasta el punto de que fuentes ministeriales informaron a ABC de que este anteproyecto podría adjudicarse «en principio, en marzo» de 2018. Su plazo de redacción sería de unos seis meses . Una vez que se disponga de él, se podría iniciar la licitación del proyecto de obra de la futura sede de la OMT.

El Palacio de Congresos de la Castellana ha tenido muchos «novios» desde que fue cerrado por incumplir la normativa de seguridad y accesibilidad y resultar muy gravoso –en torno a 80 millones de euros, se dijo entonces– el arreglo. Durante algún tiempo, se pensó en remodelarlo; el exministro José Manuel Soria –titular del departamento que entonces se llamaba de Industria, Energía y Turismo– planteó en 2015 adjudicar las reformas a una empresa privada que correría con los gastos a cambio de obtener la explotación de un hotel de 5 estrellas situado en una torre que se construiría en el recinto, en régimen de concesión.

El Ayuntamiento de la capital, entonces dirigido por Ana Botella (PP), dio luz verde a la operación, iniciando la tramitación del plan parcial promovido por Turespaña con esta finalidad. Pero la comunidad de vecinos del edificio situado en la trasera del Palacio planteó un recurso ante el Tribunal Supremo de Justicia de Madrid (TSJM) por la operación. Los jueces dictaron sentencia el 3 de octubre de 2016, rechazando el proyecto por el que se iba a licitar la obra.

El hotel previsto, de 23 alturas, suponía de hecho «una descatalogación de facto» del Palacio, según señalaba el fallo, que consideró el proyecto no compatible con el nivel de protección del inmueble. A comienzos del verano de este mismo año, el Ayuntamiento de Madrid acordó con el ferial de Madrid, Ifema –participado por el Gobierno municipal de Madrid, la Comunidad Autónoma y la Cámara de Comercio– que esta entidad pasara a gestionar el Palacio Municipal de Congresos, en el Campo de las Naciones.

Los responsables de Ifema se planteaban también entonces la conveniencia de llevar las riendas el Palacio de Congresos de la Castellana, importantísimo por su ubicación estratégica en pleno centro de la capital. De hecho, la próxima reforma del entorno del Santiago Bernabéu revalorizará aún más el recinto.