Los organizadores prevén un Orgullo a medio gas: sin 300 millones de euros y un 50% menos de turistas

«No hay duda de que la pérdida de los más de 500.000 turistas que visitan Madrid durante los diez días de celebración del Orgullo, de los cuales 320.000 son nacionales y 180.000 extranjeros, y de la pérdida de la inyección de cerca de 300 millones de euros que se dejan en la ciudad son un duro varapalo», traslada el coordinador general de MADO (Madrid Orgullo) y secretario general de Aegal, Juan Carlos Alonso. Sin embargo, a pesar de que las cifras de 2021 quedarán lejos de la última edición de 2019, la manifestación estatal del sábado, una marcha alternativa este lunes y un breve pero surtido programa de actividades se mantienen y supondrán un empujón a la economía de la ciudad.

Aunque la crisis sanitaria ha provocado el cierre definitivo de alrededor de 1 de cada 10 locales 'gayfriendly', más de 500 negocios de este tipo adornan todavía la almenda central madrileña. «Cada vez más locales se declaran 'gayfriendly' y eso hace que la práctica totalidad de los negocios de Chueca y Malasaña, La Latina, Triball, Sol y Gran Vía entren en esa categoría», apunta Alonso. Estos comercios no son los únicos que agradecerán la celebración del Orgullo, incluso con limitaciones. Hoteles, bares y restaurantes se preparan para recibir, de acuerdo con las previsiones de Aegal, a más de 250.000 visitantes.

«Para todo el sector hotelero el Orgullo es una de las fechas claves más importantes del año, como ARCO, la Fashion Week, Fitur...», asevera el empresario Kike Sarasola, presidente de Room Mate . El «buque insignia» de la cadena hotelera, Room Mate Óscar, se erige en el corazón de Chueca y Sarasola augura que todas sus habitaciones estarán completas al final de la semana. Los alojamientos de la marca ubicados en Gran Vía y Huertas, que ahora rondan una ocupación del 50%, también escalarán hasta el 60% y 70% estos días. En el emblemático The Westin Palace prefieren no facilitar datos de ocupación pero señalan que «las previsiones son buenas». «No sabemos si es por el Orgullo, pero estamos notando una recuperación bastante notable en las últimas semanas», trasladan desde el lujoso hotel.

El Orgullo madrileño, con 41 años de trayectoria a sus espaldas, se ha convertido en un referente internacional y polo de atracción de turistas y dinero . En la edición de 2019, donde se realizaron más de 260 actividades, alrededor de 400.000 personas acudieron a la manifestación estatal del sábado. En total, 700.000 turistas nacionales e internacionales pisaron la capital durante diez días para celebrar la igualdad y la libertad LGTBI, con un gasto medio diario de 500 euros. «Lo importante es que todos esos visitantes de pasadas ediciones del MADO mantienen en el recuerdo su experiencia del Orgullo de Madrid, por lo que seguro querrán repetir», opina el secretario general de Aegal, Alonso.

Las estimaciones del impacto económico de hace dos años oscilan entre 150 y 300 millones de euros, desbancando a la celebración de la final de la Champions en Madrid, que supuso una inyección de 30 millones de euros. Las reservas en el sector de la hostelería despuntaron hasta el 90% y, sobre todo en el centro, hasta el 100%. Sin embargo, las restricciones y cancelaciones de este año —como la prohibición del desfile de carrozas— no han evitado que balcones, ventanas y escaparates de Madrid se vistan con el arcoíris y comerciantes y hosteleros calienten motores para el fin de semana. «Vuelve el Orgullo sin los apoyos institucionales prometidos, pero estamos seguros de que va a contribuir decisivamente en la necesaria reconstrucción económica», confía Alonso, «no solo del barrio de Chueca, sino de toda la ciudad de Madrid».