Los Kasparov del futuro se retan en Madrid
Este fin de semana se disputa en Buitrago de Lozoya el Campeonato de España de ajedrez por equipos para escolares menores de 12 años
Son insultántemente jóvenes pero hablan y, sobre todo, juegan al ajedrez como si fueran adultos. Por eso, porque son muy buenos, 192 chavales que no llegan a los 12 años se van a jugar hasta el lunes en Buitrago de Lozoya (Madrid) el Campeonato de España de ajedrez escolar en modalidad por equipos.
Esta forma de jugar es especial y, para quien no esté muy familiarizado con el juego del tablero arlequinado, sería algo parecido al modelo que propone la Copa Davis en el tenis . En total son 40 equipos procedentes de toda España y en cada escuadra hay hasta 6 jugadores que defienden los colores de su colegio. Cada mañana, el entrenador de cada conjunto elige a sus cuatro mejores «pequeños maestros» para que se enfrenten a otros cuatro del colegio rival y, quien consiga dominar en dos partidas y media de las cuatro, se lleva el éxito.
«Yo casi prefiero jugar así porque en la modalidad individual si juegas y pierdes, se ha acabado; de esta forma, si tienes un mal día y pierdes, tu equipo aún puede ganar si ganan tus compañeros», confiesa Hugo , el número 1 del equipo que presenta el colegio público Pedro I de Barbastro (Huesca), quien también confiesa que «no tiene miedo» a viajar a la capital para competir por el título junto a sus compañeros de equipo: Nicolás, Pablo, Lucía, Josel y su tocayo Hugo , quienes incluso han preparado una equipación especial para el torneo.
«Hay días que incluso nos quedamos a jugar juntos al ajedrez en los recreos»
Dicen que su conjunto, pese a ser todos muy jóvenes — tienen sólo 10 años —, está muy «equilibrado» y explican, como si fuesen profesionales el porqué. « La clave está en el tercer y cuarto tablero y nosotros, como todos tenemos un nivel parecido, podemos ganar muchas de esas partidas que son las que marcan la diferencia, porque en los dos primeros tableros es más complicado ya que los jugadores son mejores», revela Hugo.
Otro de sus secretos es la química entre todos los jugadores, un aspecto muy valorado, por ejemplo, en la NBA. « Aprendimos a jugar casi a la vez y, como vamos a la misma clase, hay días que incluso nos quedamos a jugar juntos al ajedrez en los recreos», manifiesta el menudo jugador oscense, que estos días afila su preparación una vez que acaba el colegio, claro. Porque los deberes son lo primero.
Hay cantera
No es fácil encontrar casos como el de este equipo de Barbastro, en el que todos los jugadores son amigos y además van a la misma clase, para presentar candidatura al entorchado nacional de la categoría. Sin embargo, desde la Federación Española de Ajedrez (FEDA), que organiza el torneo junto a la división madrileña y el colegio Gredos San Diego, que alberga el evento, confirman que hay futuro en esta disciplina deportiva.
«La cantera del ajedrez español es excelente. Sin ir más lejos, el año pasado en el Campeonato de Europa por edades conseguimos tres medallas y España fue tercera en el cómputo general de todas las delegaciones , sólo superada por Rusia y Armenia, dos países ex-soviéticos dónde el ajedrez es parte de la cultura popular», resaltan desde la Dirección Técnica de la FEDA.
Allí también reivindican que el papel de este torneo, donde participan jóvenes menores de 12 años, no es sólo competir, sino también convivir y aprender : «Para muchos es el primer torneo de ajedrez en el que participan y es importante que sea una experiencia positiva: Por eso, paralelamente al Campeonato se hacen actividades como natación o partidos de fútbol, además de excursiones culturales para conocer el entorno de Buitrago del Lozoya».
«La cantera del ajedrez español es excelente»
«Estar entre los diez primeros no estaría mal pero me gustaría ganar », responde Hugo, consciente de que va a vivir una buena experiencia junto a sus amigos que podría terminar con un broche inmejorable: «El equipo que gane va al Campeonato de Europa y los dos siguientes al Campeonato de España por equipos». Casi nada.
Así que, cuando las piezas estén sobre el tablero y los relojes en marcha, que gane el mejor y quien sabe si dentro de unos años estaremos escribiendo en este diario que un nuevo niño prodigio del ajedrez ha cogido el testigo de los Nadal, Gasol o Alonso para elevar al deporte español hasta lo más alto.
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