El grupo que increpó a Iglesias en Coslada es Bastión Frontal, los neonazis más activos en Madrid

Alrededor de cinco hombres, de estética ultraderechista y con camisetas con referencias al barrio de San Blas (el grueso de estos radicales proviene de las anteriores Juventudes Canillejas, de ese barrio madrileño), impidieron el paso del político al grito de «Fuera la casta de nuestros barrios» e «Izquierda y derecha, sois la misma mierda» mientras uno de ellos saludaba brazo en alto, al estilo nazi.

Pablo Iglesias iba acompañado de su escolta y se dio la vuelta, para acceder al lugar por otra zona, sin que se llegara a mayores consecuencias. Hoy, Iglesias ha culpado a Isabel Díaz Ayuso y Vox: «Nos mandan a sus cachorros para amedrentar a la gente y hay que decirles que la democracia nos costó mucho».

Bastión Frontal nació durante el primer confinamiento aprovechando las horas bajas que pasa el Hogar Social Madrid, hasta hace un año el grupo de este tipo más activo. Bastión está conformado por alrededor de cien personas y lo que más preocupa es que entre sus filas hay gente muy joven, incluso adolescentes menores de edad.

Su principal caballo de batalla son los menores extranjetos no acompañados (menas), habiendo realizado protestas e incluso calumnias contra algunos de ellos en San Blas a los que han acusado falsamente de una violación. La Fiscalía está investigando estos últimos hechos como un presunto delito de odio.