Gallardón pregunta quién dio la orden de espiar y quién lo pagó

Para el alcalde, es esencial saber «quién se encargó de investigar, quién ordenó estas vigilancias, si se pagaron con dinero público y a quién se dio cuenta de ellas». Es «un hecho gravísimo que merece una investigación y la depuración de responsabilidades de quienes la hayan ejecutado, ordenado y financiado».

A preguntas de la presentadora del programa y de los periodistas que participaban, el alcalde recordó que estas investigaciones sólo pueden realizarlas las Fuerzas de Seguridad por orden del juez. «Ni siquiera el Ayuntamiento, que es colaborador de estas fuerzas, puede hacerlo; mucho menos las comunidades autónomas, que no tienen competencia ninguna en seguridad».

No quiso especular sobre los responsables de estas redes, aunque apuntó que «no es lógico» que un consejero regional monte un equipo «parapolicial». «El hecho constatado es que se ha realizado una investigación ilegal. Cuando esas personas estén acreditadas, actuaremos en consecuencia».

Nada que ver con Caja Madrid

También negó cualquier relación entre estas vigilancias ilegales y el conflicto por el poder en Caja Madrid, que enfrenta a la Comunidad y el Ayuntamiento madrileño: «Nada tienen que ver», afirmó. En todo momento quiso desvincular las «diferencias entre compañeros de partido» de un caso que es «una vulneración gravísima de los derechos fundamentales».

«Cauces de comunicación»

Preguntado sobre si, en caso de ser presidente regional, hubiera disuelto de inmediato esta unidad «parapolicial» al conocerla, recordó que «he sido presidente autonómico durante ocho años y nunca me planteé crear algo así».

Hasta la fecha, reconoció no haber hablado con Esperanza Aguirre directamente sobre la polémica del espionaje. No obstante, aseguró haber mantenido abiertos «cauces de comunicación»: por un lado, el vicealcalde habló con el vicepresidente Ignacio González —también espiado— y con el consejero Francisco Granados; por otro, «Rajoy habló con Esperanza Aguirre».

Urnas, Rajoy y futuro

Aunque el de las vigilancias «parapoliciales» fue el tema estrella de la entrevista, el alcalde también fue preguntado sobre el futuro político de Rajoy en caso de malos resultados en las próximas citas con las urnas. Prefirió «no mezclar procesos electorales con la vida interna del partido». Respecto a él, insistió en que su meta son los Juegos Olímpicos de 2016. Y negó que Madrid esté tomada por las mafias, como afirmó días atrás el consejero Francisco Granados: «Según Eurostat, somos la décima de las 10 capitales europeas en muertes violentas por mil habitantes».

Varios personajes políticos definieron a Ruiz-Gallardón: para Fraga, es «el futuro, en el momento oportuno, del partido y del país»; para Inés Sabanés, «hábil»; David Lucas le definió como «mal gestor», y Durán y Lleida dijo de él que era «exquisito en las formas pero muy duro en el fondo». El alcalde, a su vez, tuvo palabras para Zapatero —«en lugar de acción, conmoción»—, de Aznar: «su gestión económica fue la mejor»— y sobre una foto de él con la propia Aguirre hace más de 20 años: «Entonces yo la convencí para que se afiliase a nuestro partido».