Disfraces para tiempos terroríficos

No se extrañen si durante estos días se sienten en mitad de una película de terror. Si ven centenares de muertos vivientes, vampiros, bestias y monstruos por la calle. El Carnaval implica jarana, pasárselo bien y olvidar, aunque sea por unas horas, la adversidad. Pero pese a toda la alegría que lo envuelve, inconscientemente la gente se deja llevar por el lado oscuro, por lo tenebroso y lo siniestro. Parece que la crisis ha dejado su sello en esta fiesta, o al menos eso opinan unos de los profesionales más veteranos del maquillaje y la caracterización en Madrid.

La pareja sentimental formada por la catalana Elvira García y el vasco Gorka Arranz tienen en la calle Jorge Juan 83 y 85 su escuela privada de formación de maquillaje, estilismo, caracterización y efectos especiales Trukko Make Up, además de su centro La Kasa del Maquillaje (LKM). «Es un Carnaval que se acerca a Halloween. Sin querer, la gente se lleva al extremo su forma de sentir y prevalecen personajes más melancólicos. También es verdad que un disfraz de zombi es más barato. Basta con romper ropas antiguas», asegura Gorka.

LKM es la empresa encargada de dar vida a la treintena de personajes bestiales que durante el viernes y el sábado realizarán pasacalles por las principales vías de Madrid para dar color —agrisado— a este Carnaval de 2012. Los principales clientes de LKM son productoras, teatros e instituciones, pero también llega el particular. Sin ir más lejos, ayer, una clienta asidua solicitaba su encargo para una fiesta entre amigos para el próximo sábado. «Quiero transformarme en vampiresa y caracterizarme, hacer algo diferente», explicaba la misma. Mientras, en una de las salas, el alumno Manuel Tarazaga permanecía inmóvil desde hacía más de tres horas para dar vida a un espectacular zombi. Algo que han percibido también en LKM es la tendencia a hacérselo uno mismo. «Para ahorrar en gasto, hemos notado que la gente opta por comprar los productos y prepararse el maquillaje solo. Además, parece que se prefiere organizar la fiesta en casa antes que pagar en una discoteca», apunta Gorka.