El descubridor de Cogotas
Un proyecto largamente acariciado por fin ha visto la luz: redibujar la figura científica del arqueólogo y fotógrafo Juan Cabré y, a la vez, destacar su gran humanidad.
El resultado ha sido la exposición «El arqueólogo Juan Cabré Aguiló (1882-1947). La fotografía como técnica ... documental», recientemente inaugurada en el Museo de San Isidro y fruto de la colaboración entre el Instituto de Patrimonio Histórico Español del Ministerio de Cultura, la Universidad Autónoma y el Ayuntamiento de Madrid.
Este homenaje a la figura de un arqueólogo de principios del siglo XX ha sido comisariada por Juan Blánquez, profesor del Departamento de Prehistoria y Arqueología de la UA, y por Belén Rodríguez Nuere, técnica arqueóloga del IPHE. Por tanto, la exposición recoge parte del legado fotográfico que la familia del arqueólogo entregó al Estado en 1996 y que en la actualidad se encuentra en la Fototeca del Instituto del Patrimonio Histórico Español.
Pionero de la arqueología española
Un recorrido por la muestra nos presenta a Juan Cabré Aguiló, nacido en Calaceite (Teruel) y pionero en los estudios de la arqueología española. Vivió desde muy joven y hasta su muerte en Madrid, desde donde desarrolló fundamentalmente su labor profesional, que comenzó en su pueblo natal y se extendió por gran parte de la geografía española, y se centró especialmente en las provincias de Soria, Guadalajara, Avila, Teruel y Zaragoza. También intervino puntualmente en otros lugares, como Galicia, Cornisa Cantábrica, Levante español, Andalucía y Extremadura; incluso se desplazó al extranjero para visitar museos de arte y arqueología y consultar bibliotecas en Francia, Alemania, Austria, República Checa, Italia y Suiza y fue miembro de varios Congresos Internacionales de Arqueología Prehistórica.
En un recorrido por la exposición, y a través de sus propias fotografías, el visitante podrá seguir la metodología que aplicaba en sus trabajos, tanto en el campo de la arqueología como en el de la protección y documentación del patrimonio histórico. Y es que, en una época en que la arqueología se está consolidando como ciencia en España, Juan Cabré logra introducir la fotografía como secuencia documental.
Cinco bloques temáticos
La muestra se ha dividido en cinco bloques temáticos. En primer lugar se presenta el entorno sociocultural y los sucesos arqueológicos nacionales e internacionales coetáneos para ofrecer una imagen en el tiempo. Posteriormente se presentan algunos retazos de su vida y su entorno familiar y alguno de los métodos por él utilizados para documentar la prehistoria y la historia de España. Éstos se enlazan con un breve resumen de cuáles fueron sus aportaciones científicas en los distintos campos de la arqueología.
Aportación científica
Continuamos con la fotografía como registro de la investigación y las dificultades técnicas, culturales y sociales a las que se enfrentaba el autor en aquella época. También destaca su gran aportación científica y las instantáneas de su vida. Cierra la exposición una sala dedicada a las instituciones para las que colaboró Juan Cabré y que en la actualidad se encargan de mantener vivo su legado.
Además, una recreación de su ambiente de trabajo en el Consejo de Estudios Históricos nos muestra su mesa de trabajo, su máquina de escribir, sus dibujos y los que realizó a medias con su hija Encarnación, su mapa de España, su fichero, su proyector de diapositivas... Un lugar donde analizaba sus investigaciones sobre la pintura rupestre levantina o las necrópolis celtibéricas; sus excavaciones en yacimientos como Azaila y Recópolis, o su gran descubrimiento: Cogotas, una nueva cultura peninsular.
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