Los criterios para captar los fondos de la UE comprometen los grandes proyectos de Ayuso

Como ha informado ABC, una de las grandes infraestructuras que se prevén en la región para los próximos años en materia de transporte es la nueva la línea 11, presentada por el vicepresidente Ignacio Aguado el pasado mes de noviembre. La Consejería de Transportes proyecta este nuevo itinerario del suburbano como la «diagonal» de Madrid, con la conexión de Cuatro Vientos y Valdebebas Norte a través de 20 estaciones y más de 33 kilómetros de suroeste a noreste. Los plazos, no obstante, no concuerdan.

Fuentes del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que dirige José Luis Ábalos, explican a ABC que uno de los criterios para ser uno de los adjudicatarios de las ayudas es que se trate de planes «maduros» ; es decir, que estén en una fase muy avanzada de definición. Así, aunque no se ha decidido nada aún, desde la cartera de Ábalos señalan que la prioridad en principio serán aquellos que puedan implementarse antes de diciembre de 2023, entendiéndose por implementado como finalizado. El objetivo, dicen, es «aprovechar» el impacto del plan en el momento más beneficioso para el conjunto del país.

Este horizonte no concuerda con las fechas que dio la consejería tras el anuncio de la obra. Según el calendario conocido el pasado verano, la pretensión de la Comunidad era licitar el proyecto a finales de 2020 y empezar las obras en 2021. Solo la construcción de las nuevas estaciones de Comillas y Madrid Río se prevé que se extienda a lo largo de 45 meses, hasta 2025.

Algo similar ocurre con la reforma del Hospital de La Paz , planteada a doce años vista. La duda afectaría tanto a la reforma por fases en la misma ubicación, la opción principal, y al hipotético traslado a los terrenos de Madrid Nuevo Norte, como se planteó desde un sector del Gobierno de Díaz Ayuso. Sea como fuere, fuentes regionales insisten en la viabilidad de estos y otros proyectos, habida cuenta de que cumplen con esa «madurez». En el caso del Metro, por ejemplo, porque ya está licitado y porque se ha hecho la asignación presupuestaria. «Creemos que no habrá ningún problema porque ya está en marcha, pero lo que necesitamos es que haya voluntad y no se sigan criterios arbitrarios », dicen desde Sol.

La Consejería de Transportes, precisamente, sostiene que lo presentado «encaja plenamente» con el calendario y los principios que Bruselas plantea para acogerse al plan de recuperación, centrados en la innovación, transición ecológica y cohesión territorial. «El Reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo por el que se establece el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia establece que el plazo de finalización para la realización de las reformas e inversiones que opten a la financiación europea es el 31 de agosto de 2026», señalan, en contraposición con lo manifestado por el Ejecutivo de la nación y el límite de 2023.

La Comunidad pretende recibir un total de 22.371 millones de euros para sufragar grandes operaciones de transporte y movilidad, sanidad –actuaciones en varios hospitales y trece nuevos centros de salud–, turismo sostenible, medio ambiente o asistencia a micropymes y pymes, entre otros.

Una vez aprobado el pasado día 12 de febrero el Reglamento de la UE, por el que se establece el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, ahora es el Gobierno de Sánchez quien debe concretar el plan para España, incluyendo o no las peticiones de la Comunidad de Madrid, y remitirlo a Bruselas para su visto bueno definitivo, con otros dos meses para tomar una decisión.