Carmena pone a policías sin arma y elimina libranzas para el Maratón

Como adelantó ABC a principios del pasado marzo, los policías, hartos de sentirse maltratados , según sus representantes sindicales, por los responsables políticos, decidieron dar un puñetazo. La iniciativa la tuvo la Asociación de Policía Municipal Unificada (APMU): que no se inscribieran agentes voluntarios para cubrir el dispositivo de la maratón de Madrid ni de ninguna de las otras dos carreras que se celebran este domingo.

La protesta, a la que se unieron los sindicatos CPPM y CSIT-UP, tuvo efecto. Prácticamente no hay agentes voluntarios , en señal de queja por el malestar interno, que se ha acrecentado desde que en febrero comenzara la negociación del convenio, caducado desde 2015, y que está encallada.

El comisario general de la Policía Municipal, Teodoro Pérez , firmó el 9 de abril una orden por la que se asignan al servicio del maratón 192 agentes de la Inspección de Coordinación de Servicios Centrales; 136 de la Subinspección de Tráfico; 28 de la de Refuerzo a la Seguridad; y 28 de Policía Judicial. Además, desde la Jefatura y otras unidades se consigna a otros 16 efectivos, y por parte de la Inspección de Planificación y Coordinación Territorial, 288 más. Esto último significa detraerlos de los distritos , lo que supone el aspecto más grave de la medida desesperada de la Dirección del Cuerpo. Asimismo, se contará con 80 agentes de Movilidad y 32 alumnos de la Academia;es decir, personal sin arma reglamentaria y que, además, provienen de otros municipios.

Los 608 policías en total saldrán de aquellos a los que les toca trabajar por turno el domingo; los que se hayan presentado voluntarios (muy pocos, como hemos contado);y, en vista de que no van a ser suficientes ni de lejos, se les levanta el descanso semanal a los que haga falta, siendo los principales perjudicados quienes menos antigüedad tengan. Se les compensa con ese día de libranza y otro más, pero entre semana;asimismo, habrá quienes tengan que doblar turno, hasta que sean relevados, como ocurrirá en Tráfico. «Un despropósito total», como lo califican fuentes policiales. Esta manera de trabajar, con supresión de libranzas «por decreto», se han producido en los últimos meses con motivo del World Pride (entre finales de junio y julio) y en Fin de Año.

CPPM, el sindicato mayoritatio, se queja de que, «entre la escasez de personal y la falta de planificación, se opta por poner policías en prácticas todavía sin arma, estando en alerta 4». Denuncia que se «detrae personal de los distritos, que ya están justos, aumentando su volumen de trabajo y empeorando el servicio que se le da al ciudadano». «Como solución a todo, se suprime el descanso, con lo que pudiera darse el caso de agentes que llevarán más de 8 días seguidos de servicio», afirman en el sindicato.

Para CSIT-UP, «de nuevo se ha vuelto agredir en la conciliación familiar de los compañeros al suspenderles los descansos, y todo debido a la incompetencia en la planificación de los servicios»: «Entendemos que los agentes no se apunten voluntariamente a estos servicios, ya que ni el Ayuntamiento puede garantizar su compensación . Y de la misma manera están los ánimos muy calientes por la falta de negociación y de un acuerdo digno en la Policía. Pedimos que se llegue a un entendimiento y un buen texto como se ha hecho con otros colectivos de este Consistorio». Un ejemplo sería el convenio que han conseguido los Bomberos, sin apenas enfrentamiento.

Desde APMU, promotora del «boicot» al servicio voluntario para la maratón, consideran que «la Policía Municipal se encuentra bajo mínimos y en los grandes eventos ponen en riesgo la seguridad de los ciudadanos de Madrid al dejar vacíos de efectivos los distritos , sin poder cubrir los requerimientos de los ciudadanos ni dar un servicio de calidad».

Solo en la carrera principal, la de 42 kilómetros, participarán 11.503 deportistas, procedentes de 124 países. En la 10 K son otros 7.000, y 17.000 para la media maratón. A todas estas personas, m ás de 35.500, hay que sumar la multitud de madrileños que acudirán a de público a un evento que, por primera vez, celebra las tres carreras en una sola jornada.