Caixabank será el inquilino del edificio Axis de Colón

El edificio fue sede del banco británico Barclays, cuyo negocio minorista, de gestión de patrimonios y de banca corporativa en España adquirió precisamente Caixabank en 2014 por 800 millones de euros . Posteriormente, en 2017, CBRE GI adquirió el inmueble, construido en 1971, y encargó a Foster su reforma, en la que ha invertido 10 millones y que se prevé que esté lista en enero del próximo año.

El edificio Axis, diseñado como un cubo de cristal y barras de acero, tiene 3.900 metros cuadrados repartidos en un semisótano, una planta baja y tres plantas en altura. Fuentes de la entidad indican que el contrato de alquiler con CBRE aún no se ha cerrado y que por eso aún no se ha definido el uso concreto que se le dará al inmueble, ubicado en una zona privilegiada por la que pasan a diario 375.000 personas.

Desde el banco admiten que, por su configuración, mezclará el uso comercial con otras actividades y que será uno de los inmuebles de referencia de la entidad, que tiene a solo 250 metros, en el número 20 de la calle de Génova, una sucursal bajo el nuevo formato que ha desarrollado, las llamadas oficinas «Store», más grandes, con horario ampliado y orientadas al asesoramiento. Eso sí, Caixabank descarta que vaya a sustituir a la actual sede del grupo en Madrid, situada en el paseo de la Castellana, 51.

Caixabank, que en el marco del ajuste que incluye su nuevo plan estratégico prevé cerra r 821 oficinas en tres años , está inmersa en una transformación de la red comercial. En el ámbito urbano, por ejemplo, está abriendo cada vez más oficinas «Store» y «Business Bank», de las cuales está previsto que alcance hasta 750 en 2021 por toda España, frente a las 300 actuales.

Además, la entidad financiera ultima la apertura de dos sucursales, una en Barcelona y otra en Valencia, bajo un nuevo formato todo en uno que ha bautizado «All in one» y que aglutina toda su oferta (minorista, banca privada y premier, empresas y negocios). Estos locales son muchos más grandes, pues tanto en el caso de Barcelona como en el de Valencia superan los 2.000 metros cuadrados de superficie.