Suscribete a
ABC Premium

Iglesias de Madrid

Basílica de Jesús de Medinaceli: geografía de religiosidad popular

Todos los viernes del año, y en especial el primero de marzo, los fieles hacen largas colas para rendir tributo a Jesús

José Francisco Serrano Oceja

Esta funcionalidad es sólo para registrados

¿A quién buscáis? A Jesús, el Nazareno , «Ecce homo». He aquí, ahí está. «Vivía alejado de la Iglesia, pero un día pasé por esa puerta y sentí que alguien me llamaba. Terminé en el confesionario». «Perdí el trabajo, mi hija pequeña enfermó. Sólo ... me quedaba Él, mi Jesús». «Mi madre me traía de niña y pasábamos horas y horas esperando, los viernes, a besar la imagen de ese Jesús que te mira más allá de los ojos, que lo sabe todo de ti». «Terminé llorando arrodillado y sentí que Jesús me abrazaba y acariciaba mis cabellos»… Letanía de frases, mosaico de esperanza, jaculatorias entrecortadas que oí cuando pregunté, síntesis del alma de esta parroquia, la parroquia de Jesús de Medinaceli, Nuestro Padre que es el Hijo y nuestro hermano.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia