Ayuso aprieta el 'botón rojo': así fulminó a los consejeros de Cs para adelantarse a una moción
Los exsocios naranjas no ocultan su estupor: «Nadie nos ha llamado para comunicarnos nuestro cese. Murcia no es lo mismo que Madrid. Si buscan acabar con el partido así, nos veremos en la Asamblea»
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión«Estos van a morir matando. Ya lo veréis. Cuanto peor les vayan las encuestas, más peligrosos son» . Esta frase sonaba en Sol hace apenas unas semanas, justo después de los catastróficos resultados de la candidatura de Carlos Carrizosa el 14 de febrero en ... Cataluña. Temían en el PP de Madrid que la debacle hiciera a Cs hacerse notar en una maniobra a la desesperada. El aviso de Teodoro García Egea a su jefe, a última hora de la noche del martes, de lo que podría ocurrir en Murcia fue trasladado por Casado a Ayuso: «Si es así, deberíamos apretar el botón rojo» . Ayer por la mañana, al confirmarse la moción a Fernando López Miras, el líder nacional del PP y la de Madrid deciden la convocatoria de elecciones.
En Cs había ayer estupor: «¿Qué tiene que ver lo que ocurra en otra región con Madrid? Ayuso ha soltado la noticia al final del Consejo de Gobierno, en ruegos y preguntas, ni siquiera estaba en el orden del día. ‘¿Por qué haces esto? Murcia es Murcia y Madrid es Madrid’ », le contestó el vicepresidente Aguado. Y, en cuanto al cese de todos los consejeros de Cs, al cierre de esta edición, los afectados no sabían «nada oficialmente»: « No se han puesto en contacto con nosotros. Ni por llamada, mensaje o en persona . Los consejeros del PP, al levantarse la sesión, se han despedido de nosotros con un: ‘Nos vemos la semana que viene, que estamos en funciones’. Y tampoco creemos que Ayuso pueda cesar a nadie una vez ha convocado elecciones. Ha abierto un lío jurídico de narices». Aguado, ayer, reprochaba a su exjefa: «Estoy cesado de facto pero le digo una cosa: si piensa que va a acabar con Ciudadanos cesándome, se equivoca. Nos veremos en la Asamblea».
Ocurrió poco antes de las cuatro de la tarde. Desde el entorno de Isabel Díaz Ayuso comenzaron a informar de las primeras destituciones. Primero, de las de los dos socios con quienes menos ‘feeling’ tiene la baronesa madrileña: Ignacio Aguado y Ángel Garrido . El primero, vicepresidente, portavoz del Gobierno, y consejero de Deportes y Transparencia; el segundo, titular de Transportes, pero también el expresidente que sucedió a Cristina Cifuentes en 2018 y que tras la Semana Santa siguiente cambió del PP a Cs. Ayuso fue su viceconsejera en la época en que Garrido era el responsable de Justicia. Apenas se dirigen la palabra. Quizá por eso, los dos primeros ceses que se filtraron tuvieron un cierto regusto a «venganza personal», explicaban en Cs. En el PP negaban este extremo y explican que «es incompatible gobernar con quienes te van a hacer una moción de censura». Y recuerdan el rosario de «deslealtades» de Cs hacia ellos.
Apenas minutos después se supo que el decreto de destituciones era en realidad una expulsión total de todos los socios de los populares del Consejo de Gobierno. De este modo, todas las carteras, las 13, pasan oficialmente desde hoy (día en que se publican las destituciones en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid) a manos del PP. Fuentes de Sol indicaron que la idea no es incorporar a nuevas caras, sino que los actuales consejeros del partido asuman las seis carteras que ahora han sido descabezadas. Las dos mencionadas de Aguado y Garrido y las otras cuatro: Cultura y Turismo (Marta Rivera de la Cruz); Ciencia, Universidades e Innovación (Eduardo Sicilia); Economía y Empleo (Manuel Giménez), y Políticas Sociales y Familias (Javier Luengo).
«Ha perdido la cabeza»
Los afectados desconocían sus ceses hasta que ABC se puso en contacto con algunos de ellos , sobre las tres y media de la tarde. Pero es que también eran desconocido en el PP, excepto en el círculo más cercano a la presidenta, como su jefe de gabinete y el consejero de Justicia, Interior y Víctimas, Enrique López, un hombre también de Génova y con peso político ascendente.
La estrategia última de Ayuso tiene varias lecturas, según distintas fuentes. Por un lado, «suelta lastre en este periodo de dos meses de Gobierno hasta el 4 de mayo, cuando sean las elecciones» , a juicio de algunas personas de su círculo. Además, no era asumible después del quilombo organizado ayer continuar con la coalición en términos de gestión en un ambiente «casi guerracivilista» (el enfrentamiento era tal, que Aguado aseguraba que la jefa del Ejecutivo «había perdido la cabeza» y es «una mentirosa»); pero tampoco en cálculos meramente políticos: Cs se queda desde ya sin su principal cuota de poder territorial (mantiene atada Andalucía, tras la moción anunciada en Murcia y la que el PSOE va a promover en Castilla y León); con unos resultados paupérrimos en las elecciones generales y catalanas últimas; y con unas perspectivas en los sondeos del último año que hacen presagiar una desaparición casi ‘de facto’ del tablero político de la formación que dirige Inés Arrimadas.
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete