Junts envía al Congreso a fieles de Puigdemont para «bloquear» el país

«No aceptaremos ni una humillación más», dijo Míriam Nogueras el día de la presentación de las listas electorales de Junts; y añadió, hace solo unas fechas: «No hemos de dejar que nos tomen el pelo, lo han hecho muchísimo».

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Unas horas después, el Consell de la República, que preside Puigdemont desde Bélgica, concretó el objetivo: «Bloquear» el Congreso desde el minuto uno: la investidura. Con este objetivo se presenta Junts a una cita electoral en la que, según algunos sondeos, podría superar a ERC (liderada para esta contienda por Gabriel Rufián). En noviembre de 2019, ERC obtuvo 13 escaños (en la cita de abril de 2019: 15 diputados); y Junts, ocho (uno más que en las generales de abril y con la mitad de los asientos en manos del PDeCAT, que esta vez va por libre).

Los puestos de salida en las listas de Junts de las cuatro provincias catalanas están copados, prácticamente, por 'puigdemontistas' que, en un momento dado, serán más fieles al Consell de la República que al propio partido. Nogueras, Pilar Calvo, Eduard Pujol, Josep Pagès, Aleix Sarri, Marta Madrenas, Antoni Castellà...

«La mayor evidencia de que Junts es una teocracia donde se adora a un único Dios, que es Puigdemont, es la manera en que se impidió que Jaume Giró fuera no ya candidato sino que participara en unas primarias contra Nogueras», señala a ABC Joan López, profesor de Comunicación Política de la Universidad Abat Oliva CEU.

Antoni Castellà, candidato al senado

(Barcelona, 1970) Siempre 'indepe', incluso cuando militaba en Unió. Diputado autonómico desde 1999 casi ininterrumpidamente.

Míriam Nogueras, número 1 por Barcelona

(Dosrius, Barcelona, 1980) Recogió el acta de diputada en enero de 2016. De Convergència pasó al PDeCAT y de ahí a Junts. En 2017 se convirtió en devota 'puigdemontista'.

Pilar Calvo, número 2 por Barcelona

(Barcelona, 1960) Periodista deportiva de TV3 y Catalunya Ràdio. Fichada por Puigdemont en 2017 para la política, fue portavoz de los presos del 'procés'.

López hace referencia al breve momento en el que Giró, tras convocar Pedro Sánchez las elecciones, se postuló como candidato de Junts al Congreso. Un tuit con una foto de un cartel de Puigdemont en sus redes sociales de internet con Nogueras (acompañada del texto: «¿Elecciones? Ningún problema, nosotros estamos preparados») y una llamada al orden fueron suficiente para que, el que ostentó el cargo de consejero de Economía de la Generalitat, renunciara a las primarias y a un escaño en el Congreso.

Tiene una opinión similar sobre este suceso el analista político Josep Martí. «Para Jordi Turull, Nogueras también era su candidata, como para Puigdemont y Laura Borràs», responde a preguntas de este diario. Martí considera que Giró era la parte «pragmática» de un partido que tiene su razón de ser en la confrontación. «Puigdemont controla hasta donde quiere controlar. El numero uno de la lista, la cara, la voz... Todo es 'puigdemontismo' puro y duro. Es lo que definen como cumplidores del mandato del 1-O», añade.

Aleix Sarri, número cinco por Barcelona

(Barcelona, 1985) Asesor técnico y político de Puigdemont y Torra, tras serlo de Ramon Tremosa en el Parlamento Europeo.

Marta Madrenas, número 1 por Gerona

(Gerona, 1967) Alcaldesa de Gerona entre 2016 y 2023. Independentista intransigente es de la máxima confianza de Puigdemont.

Aunque para López y Martí el eurodiputado y expresidente de la Generalitat controla el rumbo y la estrategia claves de Junts, Toni Aira matiza: «Hay mucha leyenda sobre Puigdemont. También se dijo, por parte del PSOE y del PP, que si Xavier Trias era alcalde de Barcelona estaría controlado por Puigdemont y esto es algo poco serio. Cualquiera que conozca a Trias sabe que eso es imposible». El profesor de Comunicación Política de la Universidad Pompeu Fabra-BSM insiste: «Creo que hay demasiada leyenda sobre Puigdemont y su influencia todopoderosa en este espacio político».

En cualquier caso, la estratagema sí parece clara y se focaliza en desmarcarse de acuerdos como los que ha conseguido ERC en estos últimos años: los indultos a los condenados por el 'procés', la eliminación del delito de sedición, la inacción del Tribunal de Cuentas contra los líderes y la 'infantería' del 'procés' y, entre otros, permitir que se siga aplicando en las escuelas un sistema ilegal como el de la inmersión lingüística obligatoria en catalán (en este caso con el visto bueno del PSC). Junts apuesta por máximos: referéndum de independencia y amnistía. Así, la disyuntiva electoral será: «España o Cataluña», sin matices.

Con esta perspectiva parece difícil que Junts pueda jugar un papel de negociación con el PP. Lejos quedan los años de CiU, que se mostraba afable en Madrid mientras pasaba el rodillo nacionalista en Barcelona. No hay margen para la negociación, apuntan los tres expertos en política y comunicación consultados. «Lo veo muy difícil con esta lista de Junts. Hubiese sido posible con Giró de candidato, pues entiende la política de otra manera, más realista. Pero Puigdemont necesita el conflicto porque, si no, la estrella se apaga. Y Nogueras no va ni a hacer el esfuerzo de pragmatismo. El discurso es el bloqueo para que España no funcione hasta que no haya una respuesta positiva al independentismo», dice convincentemente Martí.

A lo que Aira apunta: «Junts está ahora más cerca de mantener una posición de fuerza negociadora con el PSOE que con el PP. No regalarán los votos, como dicen que ha hecho ERC en los últimos cuatro años. Y, si tienen la llave, bloquearán mayorías posibles hasta que alguien se mueva». Y pone el foco en una comparativa vasca: «Si el PNV ya tiene problemas para entenderse con el PP, si está Vox por medio, como dijo Andoni Ortúzar, ¡mucho más a Junts!».

En la misma línea, López añade un aspecto a tener en cuenta. Junts no quiere, pero el PP puede tener la tentación. «El Consell de la República, es decir, Junts, ha pedido a los partidos independentistas que no firmen acuerdos con los que quieran gobernar España si no se incluye la autodeterminación para Cataluña y la amnistía para los que delinquieron en 2017. Junts lo tiene claro, va a reventar las instituciones. Pero no tengo claro que el PP no intente un acercamiento», advierte, recordando los antecedentes históricos de los populares.

La formación, creada y nacida a imagen y semejanza de Puigdemont en 2017 con las bases de los restos de CiU, y que ha renunciado a exhibir las banderas catalanas en sus mítines para hacer gala únicamente de la 'estelada', afronta el 23J como una nueva etapa vital a la espera de lo que digan los tribunales europeos sobre el caso de su líder, fugado de la Justicia española. Mientras tanto, el discurso político es fácil y populista, al señalar un enemigo y cargarse de victimismo. Pueblo elegido.

«Tenemos un Estado que va en nuestra contra y, pese a esto, en Cataluña aguantamos. El proyecto de país está seriamente en riesgo. Ya basta de abusos y de tutelas por parte del Estado español. Esto va de progreso o de retroceso. Hemos recibido muchas críticas y muchísima presión. Los de Junts somos los únicos que siempre escogemos Cataluña, somos los del presidente Puigdemont», defendió Nogueras, en la presentación de la lista. Y añadió el candidato al Senado, Castellà: «Nos hemos mantenido leales al 1-O. Ordenadamente, bloqueemos las instituciones españolas».