Puigdemont será candidato a las europeas y podría regresar a España en verano

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Daniel Tercero

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Aunque la dirección del partido que lidera Puigdemont desde Bélgica no acaba de fiarse del PSOE, el texto de la ley de amnistía que aprobará el Congreso la próxima semana es mejor del que imaginaba el independentismo cuando marcó con línea roja incluir la amnistía para la investidura de Sánchez. Fue un riesgo votar «no» en enero, reconocieron ayer fuentes oficiales de Junts, pero los socialistas tenían más que perder: La Moncloa. «Todo podía saltar por los aires, sin amnistía se acababa todo», indicaron estas fuentes.

No fue así, hubo negociación y cesión del PSOE. Todos los encausados por el 1-O de 2017 y el 9-N de 2014 quedarán amnistiados. También los de la operación Judas y los implicados en Tsunami Democràtic, pese a estar siendo investigados por terrorismo. Al menos, esta es la intención del legislador monopolizada por el PSOE, Sumar y los independentistas.

Así, el secretario general de Junts, en la entrevista, no dudó en hablar del siguiente objetivo: Puigdemont será el candidato de Junts a las europeas. «La voluntad es que, si no lo ha expresado directamente en medios públicos, sí que nos lo ha expresado a nosotros; será el candidato».

Puigdemont se enfrentará en el espacio independentista a Diana Riba, eurodiputada y esposa de Raül Romeva, que hace un mes fue elegida candidata de ERC por la ejecutiva del partido de Oriol Junqueras. Este, precisamente, fue el candidato republicano en 2019 y perdió el pulso contra Puigdemont. Riba fue de número dos de Junqueras hace cinco años y lidera la delegación de ERC en Bruselas desde que el presidente de este partido no pudiera acceder al escaño por estar encausado.

¿Y un Puigdemont candidato a las elecciones catalanas? No hay que descartarlo. Turull defendió que le gustaría verlo, en tanto que «presidente legítimo», según vienen defendiendo desde 2017, como candidato de Junts, pero es un asunto que se valorará tras las europeas. «En Junts tenemos muy claro lo que debemos hacer de aquí a junio. Concentrarnos paso a paso y, a partir de junio, este será el debate que tendremos. Y, evidentemente, la primera persona a la que escucharemos será el presidente Puigdemont».

En este sentido, apuntó que en julio el prófugo podría estar de vuelta a España. Son los cálculos con los que trabajan en Junts y desde Bélgica. Dos meses después como máximo desde la aprobación de la nueva norma. «Si no hay ningún infortunio», añadió Turull. Una fecha que sería también aplicable a los compañeros de viaje de Puigdemont en Bélgica: Toni Comín y Lluís Puig; y a Marta Rovira, secretaria general de ERC y fugada en Suiza.

No obstante, los tiempos de su vuelta a Barcelona los gestionará Puigdemont a su gusto. Las fuentes de la dirección de Junts explicaron, tras las palabras de Turull, que «cada uno gestionará su vuelta como pueda y considere», por lo que no tiene por qué ser ni todos juntos ni en julio. La vuelta del expresidente catalán se planificará, eso sí, para que sea triunfal: «La idea es que sea el último en volver».

Es pronto para ver el impacto de esta victoria política de Junts en el tablero catalán, que tiene en menos de un año las elecciones al Parlamento autonómico. Pero el deleite era generalizado en el cuartel general de un partido que sigue teledirigido desde Bélgica. «No haremos leña del árbol caído que es ahora ERC, pero los catalanes ya saben quién es firme con sus convicciones y objetivos. Y los que no», señaló un miembro de la dirección de Junts.

En relación a la legislatura de ámbito nacional en el Congreso, que prácticamente no ha arrancado tras las elecciones de julio y de la que Junts ya recoge dos trofeos (decretos-ley y amnistía), los de Puigdemont advierten de que serán cuatro años así: «No puede haber ningún acuerdo con el PSOE que nos aleje de la conferencia de Puigdemont en Bruselas y del acuerdo de investidura con Sánchez».